Luz verde a una norma contra las demandas por el "efecto 2000"
El Congreso de EE UU ha aprobado finalmente una ley que limita la previsible avalancha de demandas por los daños que pueda causar el efecto 2000, los problemas informáticos derivados del cambio de milenio. Después de varios meses de negociaciones la Casa Blanca ha anunciado que Bill Clinton no vetará la ley, lo que elimina la última barrera. En un país enamorado de los tribunales, el efecto 2000 se ha convertido en una futura mina de oro para los abogados y una pesadilla para las empresas. Grandes compañías como AT&T, IBM y Microsoft han movilizado sus contactos en Washington para tratar de blindarse contra las eventuales demandas.
La ley aprobada limita pero no impide las demandas, y establece unos máximos para el pago de posibles indemnizaciones. La llamada Ley Y2K (del inglés Year 2000, año 2000) otorga a las empresas un margen de 90 días para arreglar los ordenadores que fallen por el problema del cambio de milenio, limita las indemnizaciones a unos 40 millones de pesetas en la mayoría de las pequeñas y medianas empresas y garantiza que las compañías informáticas sólo deberán indemnizar por los daños reales causados, no por la responsabilidad subsidiaria de esos daños.
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