El PP acaba con más de 20 años de nacionalismo en la capital de Euskadi

El abogado de 32 años Alfonso Alonso puso ayer fin a 20 años de nacionalismo en Vitoria al ser investido nuevo alcalde con los votos de su partido, el PP, y de UA. La debilidad de sus apoyos, 11 concejales de 27, llevó a la edil del PNV, María Jesús Aguirre, a advertir: "No puedo aventurar si tiene los días contados, pero lo va a tener muy difícil". En San Sebastián, Odón Elorza fue elegido entre insultos del público, y en Bilbao, PP y PSE abandonaron el salón cuando tomó la palabra un concejal de EH en prisión por pertenecer a ETA.

El siglo XXI comenzará con un alcalde de cada color en las tres capitales vascas: Alfonso Alonso, del PP, en Vitoria; Iñaki Azkuna, del PNV, en Bilbao y Odón Elorza, del PSE, en San Sebastián, fueron investidos ayer en una jornada movida en la costa, y más tranquila en el sur. Los principales incidentes resgistrados en los ayuntamientos tuvieron su origen en torno a los 28 presos preventivos de ETA que ayer recogieron sus actas como concejales de EH. Dos personas resultaron heridas en Rentería en los incidentes que se produjeron cuando simpatizantes de EH comprobaron que la edil presa Leire Pikabea ya había sido trasladada por la policía. En Vitoria, el pleno discurrió con absoluta tranquilidad, a pesar de que la elección de alcalde suponía pasar de página a 20 años de nacionalismo ininterrumpido. Alfonso Alonso, que ahora tendrá que buscar apoyos más sólidos que el de UA para poder gobernar con mayoría, reconoció el "esfuerzo y dedicación" del hasta ayer alcalde, José Ángel Cuerda, y se comprometió con el diálogo para "seguir construyendo la ciudad". El PNV votó a su candidata, María Jesús Aguirre, el PSE al suyo, Jesús Loza, y EH lo hizo en blanco. Su portavoz, Iñaki Ruz de Pinedo aseguró que el cambio en el Ayuntamiento no va a suponer un frenazo en el proceso de paz.

En San Sebastián, Odón Elorza fue investido alcalde en medio de insultos del público asistente. Los conatos de agresión no llegaron a más pero varias decenas de simpatizantes de EH se enfrentaron a los ediles populares e insultaron al alcalde.

En Bilbao, el único incidente reseñable durante la investidura de Iñaki Azkuna fue que populares y socialistas abandonaron el salón de plenos cuando el preso de la banda terrorista ETA y nuevo concejal de EH Xabier Aretxaga tomó la palabra y leyó un comunicado.

En Miraballes, Vizcaya, tomó posesión de su acta de concejal el preso de ETA José Antonio Urrutikoetxea, Josu Ternera, en medio de los aplausos de numerosos simpatizantes, pero sin que se produjeran incidentes. Ternera, junto a los otros dos concejales de EH, dieron su voto al candidato del PNV, José Luis Kortajarena.