El cónsul de Gambia afirma que "no se combatió la semilla del racismo"

Aquellos polvos han traído estos lodos. El cónsul de Gambia en Cataluña, Juan Antonio del Moral, responsabilizó ayer a las administraciones de no haber atajado a tiempo las conductas xenófobas y de propiciar así hechos como el incendio en un edificio de africanos de Banyoles. "Parece que no quieran saber que aquí existía una semilla del racismo de la que ha brotado este ataque y que no se combatió, porque resulta inimaginable que durante años se expusiera un negro disecado en Banyoles", explicó.

El cónsul utilizó una metáfora muy apropiada para explicar que "cuando se produce un fuego, lo primero que hay que hacer es echar agua, aunque sea salada". En su opinión, tras el incendio en el edificio habitado únicamente por africanos era necesario dar una respuesta contundente, que no se ha producido. "En la reunión de ayer les propusimos celebrar un acto contra el racismo, pero no aceptaron", manifestó Del Moral. "En la política y en la diplomacia los gestos son importantes, y hoy con nosotros no han tenido ninguno", afirmó el cónsul. En este sentido, recordó que al finalizar la reunión de la Generalitat y el Ayuntamiento con los representantes de la comunidad africana de Banyoles tampoco se les ofreció participar en una rueda de prensa que se había convocado en la sala de plenos municipal en medio de un gran despliegue informativo. Ley de Extranjería Mientras tanto, el consejero de Bienestar Social de la Generalitat, Antoni Comas, achacó a la Ley de Extranjería "que los emigrantes que llegan a España no se integren" y afirmó que este texto "incluso atenta contra los derechos humanos", por lo que exigió su reforma. Esas declaraciones fueron replicadas por el presidente de Iniciativa per Catalunya-Verds, Rafael Ribó, quien acusó a Comas de "hacer demagogia" con una ley que, según recordó, fue apoyada por el PSOE y CiU. SOS Racismo se añadió también a las críticas y ha decidido convocar una concentración (el próximo martes 27 de julio, a las 20.00 horas, en la plaza de Sant Jaume de Barcelona) con el eslogan Paremos el racismo, reclamemos la igualdad, construyamos la convivencia. "Para combatir el racismo ya no nos podemos quedar en la prevención; hay que actuar. Nos encontramos ante una nueva dimensión del racismo en Cataluña que exige una respuesta ciudadana contundente en defensa de la cultura del diálogo y en el diseño de una política global", afirma SOS Racismo.