El CGPJ designa a Victoria Cinto presidenta de la Audiencia donostiarra

La magistrada Victoria Cinto fue elegida ayer presidenta de la Audiencia Provincial de San Sebastián con el respaldo de 19 de los 21 vocales que forman el pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). La plaza se encontraba vacante tras la dimisión del magistrado José Luis Barragán, quien renunció al cargo por entender que no contaba con el suficiente respaldo del órgano de gobierno de los jueces. Cinto se convierte así en la tercera mujer en activo que preside una audiencia en España.

Cinto Lapuente, de 40 años, presentó su candidatura junto a la de los magistrados Carlos Martínez Toral y Luis Blánquez. Martínez Toral, titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Salamanca, tan sólo consiguió un voto, mientras que la candidatura de Blánquez, presidente de la Sección Segunda de la propia Audiencia donostiarra, fue eliminada previamente por la Comisión de Calificación del Poder Judicial al entender que no era la persona idónea para el puesto.Cinto es la tercera presidenta de audiencia en activo en España, junto a las de Bilbao, Ana Belén Iracheta, y la de Guadalajara, Concepción Espejel. La elección de la magistrada, hasta ahora titular del Juzgado de Instrucción número 4 de San Sebastián, se produjo mientras ella estaba celebrando juicios. La nueva presidenta lleva 12 años en la carrera judicial, diez de ellos como magistrada. Fue elegida por sus compañeros juez decana, labor que lleva desempeñando desde hace ya tres años. Está asociada a la asociación progresista y minoritaria Jueces para la Democracia.

Cursó Derecho en la UPV y lleva varios años estudiando euskera y posee un alto nivel de conocimientos de esa lengua. En su juzgado se han practicado diligencias en euskera sin necesidad de traductor.

Sus compañeros de profesión la definen como una buena jurista y destacan su capacidad de trabajo y de resolución de problemas. Mantiene buenas relaciones tanto con el Gobierno vasco como con el CGPJ. Fue una de las impulsoras de la Oficina Común de Tramitación de Ejecución de Sentencias que se creó para los juzgados de lo Penal, a pesar de las críticas iniciales, y merced a ello se ha logrado que de los más de 6.000 asuntos que estaban paralizados se hayan bajado a 1.000.

Cinto, según algunos de sus compañeros, está ilusionada con el nuevo cargo que va a desempeñar y está dispuesta a resolver algunos de los asuntos que tiene pendientes la Audiencia donostiarra. Uno de los principales escollos que tiene que solventar es lograr que funcione sin problemas la Sección Segunda, la más conflictiva de las tres y la que tenía acumulados un importante número de resolución de sentencias.

En los próximos meses se tendrá que asignar una plaza al magistrado José Luis Barragán y decidir si se concede cambio de destino a la juez Coro Cillán, que fue criticada por su compañero Luis Blánquez.