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TRIBUNALESLA VÍCTIMA, CON LA QUE VIVE CON NORMALIDAD, PEDIRÁ SU INDULTO

La mujer que envenenó a su marido dándole arsénico acepta casi cuatro años de prisión

J.T. L. aceptó ayer una pena de tres años y nueve meses de prisión por un delito de asesinato en grado de tentativa. Esta mujer, vecina de una localidad de L' Horta, ha sido condenada por intentar matar a su marido, a quien suministró pequeñas y constantes dosis de arsénico en desayunos y meriendas. El fiscal aceptó rebajar su petición de pena inicial, de doce años de prisión, al entender que dos circunstancias atenuantes rebajan la responsabilidad de la mujer; su arrepentimiento y su posterior reparación del daño. J. T. L. y su marido conviven ahora con normalidad.

La procesada estuvo durante tres meses en prisión incondicional, después de que un juez de Quart de Poblet comprobara que gran parte de las comidas que preparaba a su marido -ocho años de noviazgo, 29 de matrimonio- estaban aderezadas con Formigal, un producto con una elevada presencia de arsénico.J. T. L. no llegó a ser juzgada ayer. El fiscal adscrito al caso, Jesús Carrasco, llegó a un acuerdo con el abogado de la acusada, Vicente Coloma. Su cliente aceptó una pena de tres años, nueve meses y un día de prisión con la esperanza de que el Gobierno la indulte.

El arrepentimiento de la mujer, su disposición a reparar el daño ocasionado a su cónyuge y el restablecimiento de la armonía familiar -los hijos de la pareja hace meses que retiraron su denuncia; la víctima no deseaba que castigaran a su esposa- podrían facilitar la indulgencia del Gobierno.

De hecho, el representante del ministerio público no cambió su consideración del delito -asesinato intentado con la agravante de parentesco- aunque sí rebajó considerablemente su petición de condena. En cualquier caso, el relato de los hechos defendido por Carrasco es claro: J. T. L. actuó "guiada por el ánimo de causar la muerte" de su marido.

Así, la procesada no rectificó su actitud tras los cuatro ingresos hospitalarios que sufrió su marido, después del fracaso de todos los tratamientos prescritos o la visita a médicos de cuatro especialidades: cardiología, neumología, neurología o digestivo. La víctima estuvo 68 días hospitalizado y 353 impedido, aunque no sufre secuelas.

De todas formas, la familia sostiene que J. T. L., acosada por varios problemas, simplemente intentó disminuir la vida social de su marido para que éste no se enterara de las dificultades económicas que acuciaban a la familia.

Así lo entendió éste también, ya que, según Coloma, ha perdonado a su esposa y, en caso de que se hubiera celebrado el juicio, hubiera testificado en su favor. Según fuentes jurídicas, el tribunal suspenderá la ejecución de la pena -el ingreso en prisión de la condenada- hasta que el Gobierno resuelva la petición de indulto.

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