El consejo de Aguas de Valencia someterá a la junta de accionistas de junio su fusión con Vainmosa

Aguas de Valencia (AVSA), responsable del abastecimiento de agua potable a la ciudad, presentará a su junta de accionistas, prevista el 29 de junio, la fusión con Vainmosa, socio de la empresa de aguas de la Diputación de Valencia, Egevasa. Esta operación, que, según la opinión del presidente de AVSA, Vicente Boluda, se producirá antes de finales del año, situaría al grupo resultante en buena posición para continuar gestionando durante otros 50 años el servicio de abastecimiento de agua potable de la ciudad de Valencia, cuya concesión debe renovar el Ayuntamiento antes de 2002. De la junta de accionistas se espera una reasignación de consejeros acorde con el peso accionarial de cada grupo después de dos años de tensiones por el control de la sociedad, provocada por la injerencia del Ayuntamiento de Valencia, que exigió cambios en el accionariado como condición para prorrogar el contrato de Valencia a esta sociedad.

Boluda negó ayer que haya previsto ningún cambio de consejeros en la junta ordinaria del 29 de junio, ni tampoco cambios en la dirección ejecutiva de la empresa, si bien añadió que "puede pasar de todo".

Álvaro Aguirre, director general de Aguas de Valencia (AVSA), hizo acto seguido un esbozo de la evolución del negocio de la sociedad en el último decenio. La facturación ha pasado de los 5.460 millones de pesetas del año 1990 a los 11.558 del ejercicio pasado. Los dividendos por acción también han evolucionado al alza, concretamente de las 65 pesetas a las 220 del año pasado. En la actualidad, el grupo obtiene el 65% de sus ingresos del contrato del agua a Valencia, el 22% del negocio del saneamiento y la depuración de aguas, entre el 7% y el 8% de la gestión de basuras y otros residuos y el resto de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) y de la cogeneración, la mayoría contratos con el sector público.

Según las previsiones para este año, el grupo espera un crecimiento de su cifra de negocio del 5% y unos resultados después de impuestos de 1.020 millones de pesetas, con un aumento sobre el ejercicio anterior del 32%.

Aguirre, manifestó, por otro lado, que la empresa no se ha planteado realizar una "provisión de fondos" para hacer frente a posibles indemnizaciones a los vecinos de Valencia que se quedaron sin agua durante unos días mientras se realizaban unas obras de mantenimiento de la red de canalización.

El suministro de agua a la ciudad de Valencia y algunas poblaciones del área metropolitana quedó interrumpido durante dos días del mes de febrero a consecuencias de unas obras de mantenimiento del canal Júcar-Turia que realizaba la Confederación Hidrográfica del Júcar. El director general agregó que el contencioso con el Ayuntamiento de Valencia por este corte de suministro está en una fase técnica. "El Ayuntamiento está investigando el asunto y no se ha dirigido a nosotros más que al principio, cuando se nos formularon una serie de preguntas que nosotros respondimos en febrero".