Maragall asegura que el desfile militar por la Diagonal de Barcelona "hubiera sido un desastre"

Sólo el PP defiende sin fisuras la celebración del desfile militar en Barcelona. Cada vez más sectores del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) expresan su malestar ante el evento: las Juventudes Socialistas de Barcelona dirigieron ayer una "carta abierta" al alcalde de la ciudad, el socialista Joan Clos, en la que piden la suspensión del desfile. Del otro, el Ayuntamiento de Badalona, gobernado por el PSC, aprobará el lunes una moción contraria al evento. Pasqual Maragall afirmó ayer, por su parte, que realizar el desfile en la Avenida Diagonal "hubiera sido un desastre".

El jefe de la oposición socialista en Cataluña, Pasqual Maragall, pidió ayer calma a los sectores que se oponen a la celebración en Barcelona del Día de las Fuerzas Armadas, el día 27. Maragall reclamó que se analice la situación "con perspectiva" y se tengan en cuenta las aportaciones positivas que, dijo, tuvo el desfile militar de 1981. Maragall citó dos aspectos positivos: generó un clima de normalidad democrática y sirvió "para abrir el puerto a la ciudad". No obstante, Maragall fue muy crítico con la posibilidad, ya descartada, de que el Ejército desfilara por la avenida Diagonal de Barcelona. "Cortar la Diagonal hubiera sido un desastre", aseguró. Y añadió que ello hubiera podido despertar "antiguas susceptibilidades", en referencia a la entrada de las tropas franquistas en Barcelona en 1939 por esta avenida, informa Miguel Nogé.Maragall pidió tranquilidad ante la proliferación de descontento en las propias filas socialistas con motivo del acto. Las juventudes del PSC, que forman parte de la plataforma contraria al desfile que agrupa a 134 entidades cívicas, dirigió ayer una carta abierta al alcalde de Barcelona, Joan Clos. En la misiva, los jóvenes socialistas piden a su correligionario "que solicite la suspensión" del acto y "su sustitución por una jornada de puertas abiertas en los cuarteles militares" de la ciudad. Asimismo, añaden que, a su juicio, el desfile es "absolutamente inadecuado".

Por otro lado, el Ayuntamiento de Badalona, que con 210.000 habitantes es la tercera ciudad de Cataluña, aprobará el lunes una moción contraria al desfile. El texto ha sido presentado por todos los grupos, salvo el PP, lo que hace suponer que tendrá el aval de 22 de los 27 concejales. del consistorio. La moción sostiene que "un desfile militar con exhibición armamentística incluida no refleja la percepción que tiene la ciudadanía sobre el actual modelo de Ejército" y pide al Ministerio de Defensa que cambie el sentido del Día de las Fuerzas Armadas. La moción de Badalona puede no ser la única que se apruebe la próxima semana. A pesar de que el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, anunció el martes que participará al desfile en calidad de primera autoridad civil, CiU mantiene intacta su política de presentar mociones a los cerca de 800 municipios en los que tienen representación.

La moción apadrinada por la coalición nacionalista dice que "una parada militar con exhibición armamentística incluida" no se aviene con la voluntad de paz de Barcelona y Cataluña y se emplaza al Ayuntamiento a que no autorice el uso de la vía pública para el desfile. Las juventudes de Convergència inician hoy la campaña Lazo blanco, lazo por la paz en la que piden a los ciudadanos que se cuelguen un lazo blanco para expresar que el desfile "es un acto anacrónico".

Pese a todo, los preparativos para la parada militar continúan. Ayer se supo que el portaaviones Príncipe de Asturias atracará en el puerto de Barcelona, hasta el que también acudirán tres fragatas, el buque de transporte Galicia y un dragaminas. Fuentes de Defensa informaron ayer de que se ha solicitado a numerosas ONG autorización para utilizar fotos de misiones en que han colaborado con el Ejército para exhibirlas en una exposición en el Moll de la Fusta. "Se lo hemos pedido a una lista de ONG de dos folios y medio, pero no han contestado", indicaron estas fuentes, que aclararon que no se invitó a desfilar a las organizaciones humanitarias. "Fue un malentendido", precisaron durante un acto en la plaza de Oriente de Madrid, en el que se celebraba el 156º aniversario de la creación de la Guardia Civil, con la asistencia de los ministros del Interior, Jaime Mayor, y de Defensa, Federico Trillo.