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Ruiz-Gallardón veta un gran negocio inmobiliario junto a Campo Real

La recalificación municipal de 1,4 millones de metros cuadrados propiedad del Banco Santander Central Hispano en Perales de Tajuña, municipio adyacente a Campo Real, para levantar una ciudad de servicios al futuro aeropuerto, se ha desplomado. El presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, no autorizará "desarrollos urbanísticos" que no estén ya previstos. El concejal de Urbanismo de Perales, el socialista Francisco Montegrifo, se quejó: "Es un nuevo caso de discriminación".

El BSCH hizo una fuerte apuesta aeroportuaria en Perales de Tajuña, municipio de 2.500 habitantes y colindante con Campo Real, donde está previsto que en los próximos años se construya un nuevo aeropuerto que sustituya a Barajas. El gobierno municipal de Perales de Tajuña y la entidad bancaria firmaron un convenio por el que se recalificaban 1,4 millones de metros cuadrados de suelo rústico propiedad del banco para levantar en ellos un complejo hotelero, empresarial y de ocio. Este Ayuntamiento, con un presupuesto de 250 millones, recibiría a cambio unos 2.500 millones en concepto de impuesto de plusvalías y el 10% de los terrenos.Pero el Gobierno regional no ve con buenos ojos esta recalificación. Por eso no le dará el visto bueno, tal y como ayer anunció Ruiz-Gallardón en la Asamblea regional. El presidente explicó que la zona delimitada por el Gobierno de la Comunidad para la ubicación del nuevo aeropuerto "se encuentra actualmente poco poblada y los desarrollos urbanos existentes se sitúan a la necesaria distancia para evitar efectos negativos sobre las instalaciones aeroportuarias". "El Gobierno [regional] siempre ha entendido el sistema aeroportuario como fundamental para el desarrollo equilibrado de la región y, por este motivo, considera esencial planificar racionalmente", dijo.

Ruiz-Gallardón considera que debe ser "la Administración general del Estado, a través del Ministerio de Fomento, la instancia competente para decidir sobre la construcción del aeropuerto, las instalaciones aeroportuarias o los servicios de apoyo". "Por este motivo", añadió, "el Gobierno regional no tomará decisiones relacionadas con el nuevo aeropuerto de Madrid sin contar con el titular de las competencias: el Ministerio de Fomento".

Antes del 2019

Recordó que el Ministerio de Fomento se ha comprometido a iniciar de forma inmediata los estudios geológicos y técnicos precisos para la ubicación del nuevo aeródromo y a "adoptar las medidas conducentes a que esté en funcionamiento en el momento que resulte necesario, en todo caso, antes del año 2019, por haber llegado el aeropuerto de Barajas a su máxima capacidad".

Por su parte, el concejal de Urbanismo de Perales de Tajuña, Francisco Montegrifo, socialista, se mostró ayer sorprendido por el anuncio del Gobierno regional. Calificó la decesión del Ejecutivo de "nuevo caso de discriminación al desarollo del sureste", una de las zonas más deprimidas de la Comunidad de Madrid y donde se sitúan Perales de Tajuña y Campo Real.

El concejal de Urbanismo recordó que tenía concertada la semana que viene una reunión con la Comunidad de Madrid para tratar este asunto y que el pleno municipal iba a aprobar en breve la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana, con lo que el trámite municipal de recalificación de la finca estaría acabado. "El convenio con el banco se fraguó a partir de un informe favorable de Arpegio [empresa pública] de 1995, y ahora nos salen con éstas", indicó el concejal.

Montegrifo reconoció que, tras el anuncio del presidente regional, tendrá que reunirse de nuevo con los representantes del BSCH para "decidir qué hacer".

De 25 millones a 200.000

Las deudas comían a la empresa. A sus propietarios no les quedó otra opción que hipotecar por 25 millones una finca de casi 1,4 millones de metros cuadrados a las afueras de Perales. Finalmente, la empresa no pudo superar su crisis y el banco se quedó con las tierras.Hace unos años, el Ayuntamiento le propuso al banco comprarle la finca. Le ofreció casi 45 millones por aquel suelo rústico. La entidad bancaria, según el concejal de Urbanismo de Perales, estuvo de acuerdo. Pero algo cambió de pronto en el paisaje urbano del municipio. En 1996, el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón reservó suelo en Campo Real para levantar allí un nuevo aeropuerto. La finca embargada, adyacente a los terrenos reservados para el aeródromo, multiplicó su valor.

El banco ya no quiso venderla por 45 millones. Le propuso al Ayuntamiento firmar un convenio para recalificar esta finca. Si así se hacía, tanto la entidad bancaria como el Ayuntamiento saldrían beneficiados. El grupo parlamentario de IU calcula que las plusvalías que hubiera logrado el banco se situaban en torno a los 200.000 millones de pesetas. Sin embargo, los cálculos municipales son menores. Si los ayuntamientos cobran el 15% de las plusvalías (en este caso 2.500 millones), el banco sólo obtendría unos 17.000 millones.

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