Una asesoría legal que cobra dos veces
El Tribunal de Cuentas no sólo ve injustificado el aumento por Forcem en 95 millones del contrato originario a la empresa Odón 91. Tampoco considera de recibo que esta empresa recibiera de Forcem cinco encargos remunerados con más de 358 millones al margen de su contrato de asistencia jurídica para elaborar sendos informes. Los auditores remachan: 'Los gastos correspondientes a estos contratos no deben ser admitidos por el Inem como justificación de la subvención concedida a Forcem para atender los gastos derivados de la gestión'. Tales informes son considerados 'innecesarios', y el tribunal no ve razonable que Odón 91 los facture a Forcem fuera de su asesoramiento jurídico a esta fundación ya contratado.
El informe señala que los contratos cuestionados, que ni siquiera fueron escritos, adolecen de vicios que afectan a su validez legal al no acreditarse si los materializó persona legalmente apoderada para ello. El Tribunal de Cuentas imputa a los responsables en Forcem de tales contratos una 'conducta extremadamente negligente y lesiva para los intereses de la fundación'.
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