La Feria de Basilea mezcla un mapa del arte más innovador con una mirada a los clásicos
Chillida y Tàpies conviven con 60 proyectos inmersos en un nuevo espacio de 12.000 metros
Los comisarios Martin Schwander y Simon Lamunière han sido los encargados de seleccionar los 60 proyectos que finalmente se exponen en la sala Art Unlimited Basilea. Los organizadores de la feria rechazan clasificar las obras por género artístico, adoptando así una petición de los creadores más jóvenes, que querían que sus obras fuesen menos catalogadas por los expertos y más vistas por el público, su potencial comprador. En la sede central se dividen las galerías en las ofertas de piezas de museo y una segunda planta dedicada a las nuevas tendencias, donde figuran galerías españolas.
La feria, dirigida por segundo año por Samuel Keller, de 32 años, reúne 262 galerías de Europa, América y Asia, que presentan más de 5.000 obras de más de 1.000 artistas. Entre las casetas más originales se encuentra el taller de Van Lieshoult, de la galería Fons Welters. Construido en poliestireno claro y madera bruta, incluye un váter de dos pisos y una choza.
Otros artistas también se han confrontado con la arquitectura. Los trabajos minimalistas de Ross Knight, de Team Gallery (Londres), cuya escultura en aluminio se apoya sobre las arquitecturas temporales de las casetas, es otro ejemplo de esta mezcla de formas y materiales. O incluso los trabajos de Silke Schatz, de la Meyer Riegger, de Alemania, que propone una lectura de varios niveles de las habitaciones que ella ha ocupado en diferentes etapas de su vida, como propietaria y como estudiante.
La fotografía también está presente en la feria. Por ejemplo, Walter Niedermayr, de la Galería Anne de Villepoix (Francia), muestra tres series de clichés consagrados a las cumbres alpinas. Otra fotógrafa, Isa Ganzken, presenta 128 imágenes de la revista Der Spiegel, que fueron publicadas en 1991. Las instantáneas de Johan van der Keukens, de la galería Paul Andriesse, presentan la abstracción de la naturaleza. La calidad y la nitidez de las imágenes están fuera de toda duda. Es un lugar común escuchar que el interés de los artistas es innovar en todo momento. La Feria de Basilea confirma este año este axioma. Una nueva serie de obras realizadas por Karin Sander demuestra que las nuevas tecnologías de la información y la escultura no están peleadas.
Los visitantes de Art 32 Basel 2001 pasan por un escáner y los datos obtenidos por este medio son convertidos en una especie de escultura-perfil. La originalidad de Erwin Wurm, de la galería Krinzinger (Alemania), materializa en su escultura Fat car el lazo que une los sistemas técnicos con los mecanismos biológicos.
Galerías españolas
La galerista española Juana de Aizpuru acude desde hace 20 años a 'la mejor feria del mundo', según afirmó ayer desde un pabellón con obras de Ana Laura Aláez, Carmela García, Rogelio López Cuenca, Dora García y otros artistas. En la planta dedicada a las nuevas tendencias figuran también las galerías Helga de Alvear, Soledad Lorenzo, Tomás March y Elvira González, entre otras. 'Aquí están las mejores galerías, con piezas muy seleccionadas que pueden interesar a los mejores coleccionistas americanos y europeos', declara Juana de Aizpuru, que destaca la labor del director de la feria, Samuel Keller.La feria Art 32-Basilea 2001 estará abierta al público hasta el día 18, y su página web es www. art.ch
Babelia
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