La droga que viene
Hace unos días, las autoridades de Mislata lograron dispersar el llamado hipermercado de la droga de su término; el resultado fue un desplazamiento siguiendo el cauce del río, por lo que, con una premura digna de elogio, el alcalde de Paterna, inició actuaciones para que no consiga asentarse en su término este triste mercado. En Benimàmet empieza a inquietar este asunto, ya que la presión de uno y otro lado puede desviar a esta genta hacia lo que podríamos considerar nuestro término. Y ¿aquí quién se ocupará de empujar? Pienso que nuestras autoridades están demasiado lejos y temo que puedan tardar en tomar las medidas oportunas para evitar que vuelva a radicarse este peligroso comercio en nuestro entorno, espero y deseo equivocarme sobre este asunto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.