La ONCE y Gescartera

En su diario del lunes 24 de septiembre se relata que en un informe remitido por la CNMV a la Comisión del Congreso de los Diputados sobre el asunto Gescartera yo ratifiqué los días 2 y 4 de julio 'que la ONCE tenía el 10% de Gescartera'. Quiero precisar que nunca hice tal manifestación ante la CNMV, pues, muy al contrario, lo que se le dijo es que no había constancia documental de la supuesta donación en favor de la Fundación ONCE de dichas acciones y que se estaba procediendo a aclarar en el seno de la fundación tal extremo. Semanas después llegamos a la conclusión de que no existía ningún título traslativo de la propiedad de dichas acciones a favor de la fundación, por lo que la misma no era socia de tal agencia de valores.

También se sostiene, al parecer, en dicho informe que yo sugerí instar la quiebra de Gescartera. Justamente fue al revés, puesto que se me planteó tal posibilidad en la vía procesal civil y por mi parte dejé muy claro que, a la vista de la muy posible comisión de delitos de estafa, falsedad y/o apropiación indebida, entendía que lo pertinente es que la fundación, en la vía penal, interpusiera una querella lo antes posible, para procurar evitar la huida de los responsables criminales y el que éstos pudiesen destruir pruebas. Así fue como la Fundación ONCE presentó, bajo la dirección letrada del profesor Rodríguez Ramos, querella criminal contra los señores Camacho y Ruiz de la Serna y contra cualquier otro responsable de tales delitos; todo ello antes que cualquier otro perjudicado.