Francia estudia eliminar los fondos reservados de altos cargos

Cientos de altos cargos y funcionarios adscritos a la presidencia de la República y al Gobierno francés se arriesgan a perder las primas en dinero negro que cobran de los fondos reservados. Esta situación se producirá si el Gobierno sigue las recomendaciones del presidente del Tribunal de Cuentas, François Logerot, quien ha pedido que esos fondos queden limitados a las operaciones de los servicios secretos.

En virtud de una vieja costumbre, parte de los fondos reservados votados por el Parlamento se usa para complementos de retribución de altos cargos, organización de celebraciones y otros gastos no presupuestados. De los casi 10.000 millones de pesetas disponibles este año, alrededor de 2.000 millones se dedican a primas y gastos 'especiales', que sus perceptores no están obligados a declarar a Hacienda. Tampoco el Tribunal de Cuentas tiene derecho a fiscalizarlos. La tranquilidad con que se repartía ese dinero fue alterada hace unos meses, cuando el presidente Jacques Chirac trató de cortar una polémica sobre sus viajes privados alegando que se habían pagado con fondos reservados. Chirac acusó al primer ministro, Lionel Jospin, de disponer de más dinero 'opaco' que él. Jospin reaccionó revelando el uso que daba a los fondos y pidió al Tribunal de Cuentas que buscara una solución.