Álava restaura la segunda zona del valle salado de Añana

El proceso de rehabilitación del valle salado situado en la localidad alavesa de Salinas de Añana, una joya natural singular declarada como monumento y cuya recuperación se inició en 1999, pondrá en marcha una nueva fase con la restauración de 200 eras de las más de 5.000 existentes. Los gestores de la Diputación de Álava invertirán este año 300.000 euros para proseguir en un proceso que se prevé largo, y que persigue adecuar paisajísticamente el entorno y convertirlo en un referente turístico.

El estado de este valle situado a 22 kilómetros de Vitoria ha sido de un gran abandono hasta fechas recientes. La producción de sal no supera el 3% de sus posibilidades máximas, y de las 5.000 eras que se explotaban en los años 60 actualmente sólo funcionan dos centenares tras poner en marcha el plan de recuperación. Desde la diputación valoran que la actividad productiva original 'no es económicamente rentable', pero es necesaria para la conservación de redes y entramados. El futuro del valle salado 'pasa por convertirse en un foco de atracción turística' y por desarrollar la actividad salinera necesaria que permita su conservación y una serie de actividades en su entorno relacionadas 'con la educación y con el ocio', indican desde la institución foral.

El plan de urgencia se inició con un cierre perimetral de la zona con el objeto de salvaguardar el espacio declarado como monumento histórico. Estos trabajos se dirigen a recuperar los canales de conducción de salmuera y la restauración de las eras, de las que el año pasado se rehabilitaron dos centenares, la misma cifra que a partir de ahora se pretende adecuar en dos años.

El interior del valle se encuentra repleto de escombros procedentes de los entramados que constituían las viejas plataformas. En 1998 se impulsó la formación de un colectivo que agrupara a los salineros propietarios de las eras y desde el año 2000 se pusieron en marcha las actuaciones de urgencia. El pasado año se iniciaron las dos primeras fases del denominado Plan Integral de recuperación del valle, proceso en el que se inscriben las acciones que se materializan a partir de este mes.

Desde la Diputación de Álava consideran este proyecto de una magnitud semejante a la de restauración de la Catedral de Santa María, un proceso de largo recorrido en el que aún restan años de trabajos para conseguir una suficiente recuperación.

El proyecto prevé reutilizar el núcleo urbano de Salinas de Añana, y dotar al área de equipamientos de índole cultural y turística, entre los que se encuentran viviendas, hoteles y zonas de ocio.