Alarmante
La situación de degradación que se vive en el barrio de Cuatro Caminos (Madrid) es alarmante. Entre las calles Topete, Almansa y Carnicer están abiertos un sinfín de negocios: locutorios, peluquerías, y sobre todo bares de copas regentados en su mayoría por personas procedentes de Santo Domingo. El comportamiento de una gran parte de esta población inmigrante deja mucho que desear, pues en lugar de adaptarse a nuestras costumbres, son ellos los que han marcado territorio. No respetan reglas de urbanidad, los escándalos a todas las horas del día, e incrementados por la noche, son demenciales, de tal manera que no nos dejan descansar. El trapicheo con drogas es notorio. No podemos asomarnos a la calle ni pedirles que bajen la voz, te contestan con palabras soeces, y te provocan para armar peleas, e incluso te tiran botellas a tu balcón. Orinan en la calle, tiran los cubos de basura y esparcen el contenido. Juegan al balón a cualquier hora de la noche. Sacan sillas y se sientan en las aceras hasta altas horas de la madrugada, consumen bebidas en la calle, tienen peleas entre bandas rivales, etcétera.
No se entiende cómo las personas que supuestamente vienen a España a buscar una vida más digna que en su país se gastan el dinero en bebidas y perjudicando su salud. Los españoles también hemos sido y somos emigrantes, pero nos atenemos al refrán: 'Donde fueres, haz lo que vieres'.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.