Vuelve la normalidad a las playas del Maresme tras la retirada de 65 metros cúbicos de residuos sólidos

La normalidad vuelve poco a poco a las playas del Maresme tras un fin de semana marcado por la presencia de los residuos sólidos que la lluvia arrastró durante el temporal de la semana pasada y las corrientes marítimas devolvieron al litoral. Mientras que la arena se encuentra ya en buen estado, los equipos de limpieza del Departamento de Medio Ambiente de la Generalitat continuaron retirando basura del agua durante toda la jornada de ayer. Sólo durante el fin de semana, las embarcaciones recogieron 65 metros cúbicos de residuos flotantes.

Tras horas de intenso trabajo de saneamiento tanto en las playas, por parte de las brigadas municipales, como en el agua, por parte de las embarcaciones de la Agencia Catalana del Agua (ACA) del Departamento de Medio Ambiente, ayer entre Premià de Mar y Barcelona sólo ondeaba la bandera roja que prohíbe el baño en las playas de Ocata y El Masnou. En estas playas, a los residuos sólidos se sumó el vertido de aguas fecales al mar, como consecuencia de la saturación que sufrieron los colectores y la depuradora durante la tormenta. En el resto de playas del Maresme y el Barcelonès, durante la mañana se izó la bandera amarilla, que indica precaución, aunque el agua no presentaba problemas desde el punto de vista sanitario. En Barcelona las banderas verdes señalaban normalidad total, aunque aún se apreciaban restos de basura en el agua.

Pocos bañistas

Pese a la relativa normalidad tras la retirada del grueso de la porquería, durante el día de ayer las playas del Maresme y el Barcelonès estuvieron mucho menos concurridas que un día de agosto normal. El mal estado de la arena y el agua durante el fin de semana -cuando entre la basura se pudieron ver incluso ratas muertas- , sumado al cielo parcialmente nublado hicieron desistir a muchos de acercarse a la playa. Todavía fueron menos los que se bañaron, ya que en prácticamente todas las playas quedaba una desagradable franja de pequeños restos de basura justo donde las olas rompen en la orilla. 'Si tenemos calor nos refrescaremos en las duchas, pero nada de bañarnos en el mar' fue la frase más repetida entre la poca concurrencia de la playa de El Masnou. Más al norte, en las playas de Vilassar, Mataró y Caldes d'Estrac, algunos bañistas se adentraron en el agua y en Sant Vicenç de Montalt, por la tarde, algunos jóvenes incluso se lanzaron al agua con tablas de surf.

La ACA aseguró ayer que la situación vivida este fin de semana es totalmente normal tras lluvias torrenciales como las que afectaron a los municipios de El Masnou y Montgat, donde en pocas horas llegaron a caer 250 litros de agua por metro cuadrado. En estos casos, el agua del mar se ve alterada por los residuos y el lodo que arrastra el agua de la lluvia por rieras y colectores.

La directora de la ACA, Marta Lacambra, explicó que para restablecer definitivamente la normalidad las 12 embarcaciones de la agencia continuarán peinando el litoral para retirar la totalidad de los residuos del agua. Los 65 metros cúbicos de basura retirados durante el pasado fin de semana representan seis veces más que los que se recogen habitualmente en el tramo afectado por el temporal. En el caso de los restos de barro que enturbian el agua, la ACA explicó que se trata de arena removida que volverá a depositarse en el fondo del mar en unos días. Ahora sólo queda esperar que el mal tiempo previsto para esta semana no se traduzca en temporales como los de la pasada.