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Arzalluz cuestiona la decisión de Urkullu de que no siga Bergara

EA exige al PNV una negociación "respetuosa con la identidad de cada partido"

El presidente del PNV, Xabier Arzalluz, enmendó ayer la plana a Iñigo Urkullu, máximo responsable de la organización peneuvista de Vizcaya -la más importante del partido-, por decidir que no siga como diputado general Josu Bergara y proponer a las bases como candidato a José Luis Bilbao. Arzalluz utilizó en su crítica los mismos argumentos usados el pasado domingo por Iñaki Anasagasti, portavoz en el Congreso, en un articulo en Deiatitulado En ningún caso la propuesta es vinculante. Diversos cargos y militantes del partido consultados mostraron su "sorpresa" porque el PNV esté dirimiendo en público sus diferencias internas, algo absolutamente inusual en el partido.

En el artículo dominical de Anasagasti en el rotativo nacionalista, el portavoz en el Congreso de los Diputados criticaba la forma en que la ejecutiva de Vizcaya -el Bizkai Buru Batzar (BBB)- ha descartado la continuidad de Josu Bergara. Sugería incluso que Urkullu había ocultado a Arzalluz, en la reunión me mantuvieron 18 de noviembre, la decisión ya tomada de proponer a las bases al actual diputado foral de Presidencia, José Luis Bilbao, como candidato avalado por el BBB, así como otros datos relevantes. En concreto, menciona "unas encuestas sobre las que al parecer no se ha dado información cabal y completa al presidente del EBB", en las que el actual diputado general, Josu Bergara, saldría bien parado.

Remachando el propio título del artículo Anasagasti recordaba el contenido de los estatutos regionales y recalcaba que la propuesta de candidatos del BBB "en ningún caso tendrá carácter vinculante". Por ello, solicitaba a los afiliados ("pedimos", escribían en plural) que en el proceso abierto "se vote a quien se quiera, al hombre o la mujer que mejor equipo pueda formar". Anasagasti también criticaba que no se hubiera producido una elección "consensuada" entre las "distintas sensibilidades" del partido en Vizcaya. Sobre todo cuando se habían aireado media docena de nombres (entre ellos, el de la diputada foral de Medio Ambiente, María Esther Solabarrieta, esposa de Anasagasti).

El mismo domingo, en el acto de recuerdo a Sabino Arana en Sukarrieta, la única alusión de Arzalluz a un artículo que causó conmoción en la militancia peneuvista fue su llamamiento a apoyar "como una piña" a los candidatos que designe el partido, "aunque sea una escoba". El lunes hubo reunión de la dirección del PNV en Sabin Etxea, donde se trató el tema. Un día después, dos miembros de la dirección, Josune Ariztondo y José Antonio Rubalkaba, fueron preguntados por las críticas internas y la respuesta de Rubalkaba fue: "No hay comentarios".

Pero Xabier Arzalluz rompió ayer en ETB el silencio y la norma interna del partido de que "los trapos sucios se lavan en casa", según reconocían varios miembros vizcaínos y alaveses. La permanente del EBB también se reunió ayer, aunque oficialmente no se confirmó que se tratara de la crisis. En su entrevista en ETB, además de confirmar el fin de su ciclo político y su retirada de la vida activa el año que viene, Arzalluz dijo de la cuestión planteada en Vizcaya: "La clave es un poco lo que dice Anasagasti, que no es bueno cambiar de caballo en medio del río y, entonces, hay quienes con él piensan que, en una situación dura como la que estamos, en unas elecciones que van a ser muy duras, entre otras cosas, hay que elegir al caballo más fuerte". "Y, en ese sentido, Bergara, evidentemente, tenía mucho más apoyo de voto hacia su persona, por muy conocido, que [José Luis] Bilbao, a quien nadie conoce", agregó.

Esta idea de que Bergara, que ha cosechado unos buenos resultados en las dos elecciones en las que se ha presentado, sigue siendo un candidato idóneo para las elecciones forales de mayo próximo ha estado presente entre los afiliados en algunas reuniones mantenidas en los batzokis. Urkullu rehusó ayer valorar las palabras de Arzalluz, aunque fuentes cercanas no ocultaron su sorpresa porque el presidente del EBB ponga en duda el proceso seguido por la ejecutiva de Vizcaya y, sobre todo, porque lo haga en los medios de comunicación.

Proceso "bloqueado"

Por su parte, el portavoz de EA, Rafael Larreina, reconoció ayer que el proceso negociador con el PNV para concurrir en coalición se encuentra bloqueado porque el partido de Arzalluz defiende "intereses particulares" camuflados como "intereses de país" y mantiene una postura "inflexible". Larreina desveló que el martes el PNV les comunicó telefónicamente que no veía posible continuar las negociaciones con el rechazo de EA a un pacto global. Aunque nadie o quiere dar por fracasado un acuerdo preelectoral, Larreina exigió una negociación "respetuosa con la identidad de cada partido".

Con el criterio del PNV para negociar una nueva coalición, los comicios generales de 2000, EA perdería el 40% de su alcaldías y el 30% de sus concejales, "y eso es inadmisible", dijo Larreina, quien criticó que en el PNV "hablan mucho de ilusión, pero practican el ilusionismo, al querer hacer desaparecer buena parte de los electos de EA".

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