Malas críticas y poco público para 'Pinocho' en Estados Unidos

Mala acogida para Pinocho en Estados Unidos. Después de las malas críticas, el público norteamericano recibe con frialdad la película de Benigni. El día del estreno ingresa apenas 290.000 dólares en las 1.195 salas, es decir, 243 dólares en cada cine donde se programa. Cifras poco esperanzadoras, sobre todo si se considera que el estreno americano debería servir como pasaporte a la nominación al Oscar.

Mientras en Italia el filme ha tenido hasta el 28 de diciembre ingresos de más de 25 millones de euros, informa La Repubblica, en Estados Unidos Pinocho parece sucumbir ante colosos del calibre de Las dos torres, secuela de El señor de los anillos, o Atrápame si puedes, de Spielberg, con Leonardo Di Caprio y Tom Hanks, que en el mismo día del estreno de la película europea ha alcanzado 9,7 millones de dólares en poco más de tres mil salas.

Hasta ahora, después de la clamorosa exclusión del filme de Benigni de la nominación a los Golden Globe, las malas noticias se han sucedido. Del New York Times al New York Observer, el New York Daily News y Los Angeles Times, las críticas han sido feroces, como la del Baltimore Sun, firmada por Jay Boyar, que mortifica a película y actores exaltando, por contraste, el Pinocho de Disney de 1940.

"La idea de Benigni de volver al cuento original de 1883 es interesante -escribe el crítico-, pero es la única idea decente del filme. La historia fundamental no se aleja demasiado de la que conocíamos por Disney". "Pero sobre todo", subraya el periódico, la peor idea "es el Benigni cincuentón que interpreta a la marioneta". "Es difícil aceptar ver en las carnes de un niño a un hombre de 50 años que no hace nada por esconder su calvicie y su estatura, y es también duro aceptar que sea una marioneta. No hay nada que se asemeje a una marioneta en la apariencia o en el modo en que Benigni se mueve".

"Sin alma"

Juicios despiadados también en los periódicos neoyorquinos y en Los Angeles Times. El crítico de este diario, Kevin Thomas, habla de una película "sin alma", aunque elogia el trabajo del escenógrafo Danilo Donati, y el de Nicola Piovani, que firma la banda sonora. "El filme", escribe Thomas, "es un ejemplo de trabajo bien confeccionado sin lugar al que llegar". Benigni, además, "es constantemente insoportable en su fase de desobediencia naïf y, a través de una transformación, llega a una condición de virtud bañada de un martirio autocomplaciente y de nobleza de ánimo". Y, al final, la estocada: "Cuando dirigió La voce della luna, Fellini imaginó hacer un Pinocho con Benigni y, con su estilo visionario, seductor y a menudo profundo, habría podido realizarlo. Habría sido mejor si Benigni hubiera dejado que la idea muriese con el maestro".