Cascos insiste en su hipótesis de un sabotaje en el AVE a Lleida

El Ministerio de Fomento insistió ayer en la hipótesis de que hubo sabotaje en la rotura de la catenaria en la línea de alta velocidad Madrid-Zaragoza-Lleida. Por la mañana, el ministro, Francisco Álvarez-Cascos, había reiterado la tesis. Por la tarde, el secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, difundió un comunicado en el que se dice que "carece de fundamento" pensar que fue por una deficiente instalación.

"Las zonas neutras en la vía cuentan con señalización fija que es vista por los maquinistas. No es cierto, en consecuencia, que eventuales deficiencias del sistema ASFA provoquen que los trenes hayan entrado en puntos neutros generando ningún fenómeno que pueda fundir el hilo sustentador de la catenaria", afirma el comunicado de la secretaría de Estado.

El texto asegura que "la información publicada por EL PAÍS, en la que 'ingenieros' anónimos que no se responsabilizan con su nombre y apellidos de sus opiniones ponen en duda el carácter intencionado de los daños sufridos por la catenaria (...) carece de todo fundamento". El PAÍS informó ayer que dos ingenieros de Gestor de Infraestructuras Ferroviarias y UGT de Aragón negaban que la rotura de la catenaria se debiera a un sabotaje.

El comunicado insiste en la hipótesis que han expresado los técnicos del ministerio en sus informes, según la cual la rotura del hilo sustentado fue provocado de forma intencionada. Al comunicado se adjunta un certificado emitido por Carlos Román, director de Protección Civil y Seguridad de Renfe. Según este texto, la experiencia de los técnicos y otros factores "nos sitúan en condiciones de afirmar, sin ningún género de duda, que el cable de sujeción de los contrapesos (...) ha sido cortado intencionadamente con una cizalla o herramienta de similares características".

Un diseño normal

En el comunicado, Blanco indica también que el sistema de diseño y construcción de la catenaria de esta línea de alta velocidad es el normal en toda línea ferroviaria.

Ya por la mañana, el propio ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos, había ratificado esta tesis. "Tengo plena confianza en los técnicos y a ellos me remito", manifestó durante la inauguración de un tramo de la Autovía del Mediterráneo en la localidad de Castell de Ferro (Granada).

A lo que añadió: "Hay presentada una denuncia, que pone de manifiesto que se cuenta con razones de peso para poder formularla, e intentar esclarecer la causa y el origen de los que han hecho daño al tendido de la catenaria".

Por su parte, el secretario general del Sindicato de Maquinistas de Renfe (Semaf), Juan Jesús García, manifestó su posición contraria a la tesis del ministerio. "Me parece extraño un sabotaje en esa línea, no tiene un sentido claro", declaró a la agencia Servimedia.

García dijo que tampoco se daban las condiciones para que se hubiera partido la catenaria sola: "Sufre un enganchón cuando ha pasado algo, cuando las condiciones climatológicas han dejado la catenaria mal, cuando se deterioran por el paso del tiempo y de muchos trenes; pero una catenaria nueva, era difícil".