"Todo ha sido un abuso de autoridad"

"Todo ha sido un abuso de autoridad, no sé si en época de dictadura estas cosas sucedían", manifiesta la alcaldesa de Buñol, Minerva Gómez, quien había ordenado a la Policía Local "que si los camiones de basura olían y vertían lixiviados, les dijesen que diesen la vuelta". Así lo hicieron con seis camiones en la madrugada del miércoles, pero en el control hubo otros "cinco que se lo saltaron". La alcaldesa acudió a la concentración vecinal que quería impedir el paso de los vehículos al vertedero de Dos Aguas sobre las cinco de la mañana: "Me dirigí al capitán de la Guardia Civil y no me escuchaba, como se puede ver en las imágenes que se grabaron. Ha habido un abuso de la autoridad porque la autoridad competente en Buñol era yo. Me estaba faltando al respeto y desobedeciendo a la autoridad que le decía que los camiones debían irse. Los transportistas decían que tenían órdenes de no moverse". Estos camiones llevaban un escrito de la Dirección General de Transportes que certificaba una inspección técnica sobre la carga cerrada. "No sabemos cómo, porque despedían olor y vertían líquidos", comenta Gómez, quien hace hincapié en que no se impidió el paso a los camiones. "Se les decía que debían volverse porque no iban herméticos", afirma. "Fue el capitán quien solicitó refuerzos de los antidisturbios y les ordenó que arremetieran contra la gente. Yo le dije que iban a generar conflicto y él me dijo que tenía órdenes de Delegación del Gobierno". Y cargaron contra los vecinos. Gómez, tratada "a empujones", se acercó a un vecino que era golpeado: "Fui para decirles que ya estaba bien y el capitán me dijo que yo también estaba detenida".

"La Guardia Civil dijo que tenía órdenes de la Delegación del Gobierno"