Una avalancha de cocaína para Europa
España se ha incautado en lo que va de año de 14.394 kilos de la droga esnifable, la mayor parte en barcos y en el mes de mayo
No se sabe muy bien si ha sido casualidad o una operación diseñada por los narcos, pero el caso es que una flota de barcos cargados de cocaína ha surcado en mayo el Atlántico rumbo a España durante las últimas semanas. Primero fue el Irene, un pesquero de Togo de gran porte. Luego cayó la Cork, una patrullera de la Segunda Guerra Mundial reconvertida. Ese mismo día fue asaltado el Goana, un sloop botado en el Caribe. El último fue el Pescam I, un pesquero mauritano abordado el viernes pasados. Entre todos (más un contenedor con langostinos rellenos de droga hallado en Santurce) traían 11.300 kilos de cocaína, con los que se podía haber trazado una raya esnifable de más de 2.900 kilómetros: de Cádiz a Berlín. Y todo esto en sólo mes y medio.
"El consumo baja en EE UU, pero sube en Europa occidental", según Naciones Unidas
La avalancha de cargamentos comenzó con el año, pero, como una bola de nieve, empezó a crecer en abril. Desde el 1 de enero hasta el 16 de abril, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y los aduaneros de la Agencia Tributaria se habían incautado de 3.100 kilos de clorhidrato de cocaína, que es como se llama esa droga cristalizada (mezcla de pasta de coca, ácido clorhídrico y éter).
La mayoría de la droga había sido incautada en tierra, pero para entonces varias Armadas (española, británica y francesa) y el barco de presa de Vigilancia Aduanera (el Petrel) esperaban en el mar a la flota de la coca. "No es que hubiera una operación especial de las fuerzas de seguridad ni una instrucción específica, sino que han coincidido en mayo varias operaciones que llevaban ya algún tiempo en desarrollo", indicaron ayer fuentes del Plan Nacional sobre Drogas.
El caso es que después de que abril se cerrara con la captura del Irene y los 2.500 kilos que alijaba, mayo empezó con el hallazgo de 200 kilos en Algeciras durante la fiesta del trabajo y siguió seis días después con la requisa de un contenedor en el puerto de Bilbao con 1.750 kilos de cocaína oculta entre cajas de colas de langostinos de Venezuela.
Tres días después, otra vez en el Atlántico, en dos operaciones de abordaje simultáneas, eran requisados 4.100 kilos. Luego llegó a Barcelona un bloque de mármol perforado relleno con otros 294 kilos; mas 250 kilos que llegaron a Llanes (Asturias) y los 120 kilos que un arrastrero capturó en aguas de cabo Prior (A Coruña), el viernes pasado. Y por fin, fue abordado el Pescam I, que iba derecho para Galicia con 2.500 kilos de cocaína venezolana que supuestamente iba a repartir la red que presuntamente dirige Eulogio Romero Betanzos, Lojito.
En resumen, que en lo que va de año ya han sido decomisados 14.394 kilos de lo que en unos lados se llama farlopa y en otras perico, y en todo el mundo cocaína, frente a los 9.782 kilogramos del mismo periodo de 2002, año en el que en total fueron requisados 17.616 kilos.
¿Es una avalancha? "No sé si avalancha, pero lo de mayo no ha sido normal", confesaban ayer expertos antinarcóticos. Y, esa droga, ¿era toda la que venía? "Seguro que no, pero eso es imposible de saber. Los cálculos habituales es que se aprehende entre el 10% y el 20% de la droga", agregan. ¿Obedece a un aumento del consumo de cocaína? "En Europa occidental sube y en EE UU baja", explicó a primeros de mayo en Madrid Antonio María Costa, director ejecutivo de la División de Crímenes y Drogas de la ONU. Y a Barajas no paran de llegar boleros: siete en mayo con 36 kilos en sus intestinos.
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