Camps dice que la futura central de Castellón producirá la energía suficiente para la demanda

Para ello será clave la construcción de una nueva central eléctrica en Castellón por parte de Iberdrola, cuyo consejero delegado anunció que estará en marcha "a finales de 2006 o principios de 2007", lo que permitirá a la Comunidad Valenciana ser "exportadora de energía".

Francisco Camps afirmó ayer que el crecimiento "tranquilo y potente" de la Comunidad Valenciana se aprecia en el aumento de consumo energético producido durante 2003. En el mes de agosto, este incremento ha llegado a un 22,9% más que en 2002. El acumulado durante todo el año refleja un aumento del 10,6%, mientras la media nacional se sitúa en un 5,6%.

Sin embargo, las aspiraciones del presidente persiguen convertir a la Comunidad Valenciana en energéticamente "autosuficiente", hecho que, según el consejero delegado de Iberdrola, Ignacio Sánchez, puede conseguirse con la puesta en marcha de una segunda central eléctrica en Castellón, capaz de suministrar 800 megavatios, y cuya puesta en marcha se prevé para "finales de 2006 o principios de 2007". Sánchez afirmó que esta nueva central permitiría incluso "exportar" energía a otros lugares de España.

Camps, que afirmó que la Comunidad Valenciana "en su conjunto" es el "primer cliente de Iberdrola", anunció que a partir de septiembre, funcionará un "consejo regional asesor" de la eléctrica en la Comunidad Valenciana, para que realicen "un seguimiento puntual y profesional, desde fuera", de las necesidades energéticas y de las estrategias a adoptar.

Poco después de que Camps informara de que Bancaja y la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) entrarán a formar parte del consejo de administración de Iberdrola tras adquirir acciones de la compañía, su consejero delegado aseguró que Iberdrola piensa en Castellón como punto del que parta un cable de conexión eléctrica instalado por Iberdrola, que unirá la península con las Islas Baleares, que han registrado problemas de suministro.

Camps y Sánchez hicieron estas declaraciones a las puertas de L'Hemisfèric, donde firmaron un convenio para dotar a la Comunidad Valenciana de una nueva tecnología de acceso a internet con banda ancha que, según el consejero delegado, permitirá navegar por la red a una velocidad de "600 kilobites, cinco veces más rápido que las actuales líneas ADSL y 10 veces más que las normales". Este sistema funciona a través del "cable de la luz", y es el primero que se instalará en España.