Atacado por quinta vez el domicilio del senador del PP Gonzalo Quiroga
El domicilio en San Sebastián del senador del PP Gonzalo Quiroga fue atacado en la madrugada del miércoles con un artefacto explosivo lanzado desde la calle, que impactó contra un balcón de la fachada aunque no llegó a romper el cristal ni penetrar en el interior de la vivienda. La mecha y el ácido ennegrecieron el suelo y las paredes, pero no provocaron daños materiales. Se trata de un nuevo episodio de la violencia callejera que en los últimos años han mantenido sectores próximos a ETA. Instituciones y fuerzas políticas vascas condenaron ayer de forma unánime el ataque.
El incidente se produjo después de las tres de la madrugada, mientras el senador y su familia dormían "muy cerca de donde se produjo el impacto", según relató el propio Quiroga. El senador se mostró sereno pero firme ante este nuevo ataque contra su domicilio en San Sebastián, que ha sufrido agresiones similares en cuatro ocasiones anteriores.
El senador guipuzcoano advirtió ayer públicamente a los autores que con estos procedimientos de violencia y acoso "no van a conseguir nada". Quiroga recibió ayer la llamada telefónica del lehendakari, quien le transmitió su solidaridad. "Es la primera vez que llama", aseguró el senador. El lunes, Ibarretxe presentaba en Madrid y apoyaba con su presencia la campaña de sensibilización que impulsa su Ejecutivo en favor de las víctimas y los amenazados por el terrorismo.
El senador popular también recibió la llamada del consejero del Interior, Javier Balza, al que más tarde reclamó públicamente que, además de "arropar" a las víctimas, actúe para evitar la persistencia de estos sabotajes. "No es hora de condenas ni de palmaditas en la espalda, es hora de actuar como se debió haber actuado desde la constitución del Gobierno autonómico". Quiroga reiteró también su apoyo a las medidas políticas que ha emprendido el Gobierno del PP "con el fin de evitar que ETA, en sus diferentes versiones, goce de representación política e institucional, así como de financiación para sus fines delictivos".
Todos los partidos, el Gobierno autónomo y el delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo, condenaron el ataque. El Ejecutivo autónomo aprovechó para recordar la necesidad de "un compromiso de los ciudadanos que aman la paz para que nadie pretenda acallar la voz de un representante elegido democráticamente". El nuevo presidente del PNV , Josu Jon Imaz, consideró "intolerable" este ataque en la primera conferencia de prensa desde su recién estrenada responsabilidad.
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