Un oftalmólogo español descubre un nuevo tipo de cefalea y su tratamiento curativo

El oftalmólogo de la Fundación Hospital Alcorcón (Madrid), Julio Yangüela Rodilla, apoyado por el Departamento de Neurología de este centro hospitalario, ha sacado a la luz un nuevo tipo de dolor de cabeza y la forma de curación, tras unos ocho años de investigación entre pacientes de su consulta. La revista Neurology, considerada como una de las más prestigiosas de la especialidad, ha publicado esta novedad mundial.

Yangüela había detectado que ciertos pacientes sufrían un dolor de cabeza que comenzaba junto al párpado superior del ojo e irradiaba al resto de la frente. En un principio, podría confundirse este dolor con la trocleitis, una inflamación del cartílago del ojo. Sin embargo, una simple radiografía orbitalia o una ecografía eran suficientes para deducir que el dolor que sufrían estos pacientes no era consecuencia de esa inflamación, sino que afectaba directamente al nervio trigemino. Éste, al sufrir algún tipo de irritación, es el que produce los dolores de cabeza.

La cefalea troclear primaria empieza junto al párpado superior y se irradia a la frente

Poco a poco, dedujeron que se trataba de un nuevo dolor de cabeza, bautizado ahora como cefalea troclear primaria. Los análisis de los casos permitieron deducir que el dolor de cabeza se producía por la inflamación del cartílago troclear, que se encuentra en la parte superior del globo ocular. Éste irradiaba el dolor en la zona del ángulo interno que produce el ojo con la zona de las cejas y, desde allí, pasaba a la parte posterior de la cabeza. "Los pacientes que lo sufren lo pasan muy mal porque es un tipo de dolor que no remite con los analgésicos habituales", señala el oftalmólogo Yangüela Rodilla. En los últimos años, ha seleccionado junto con sus colegas del departamento de Neurología a 32 pacientes con estos síntomas, de los que 18 fueron elegidos directamente para este estudio y el tratamiento posterior.

El dolor puede llegar a ser tan intenso que los pacientes ven cómo se agrava de forma palpable en el caso de que miren hacia abajo. Tampoco soportan la más mínima pulsión en esa zona. "Se trata de un dolor crónico, sordo, que a veces se agudiza por el estrés, el nerviosismo y por el exceso de trabajo. Los servicios de urgencia suelen recibir más de un caso de cefaleas de este tipo", añade el médico.

Una de las pruebas clave para asegurarse de que un paciente sufre esta cefalea troclear primaria consiste en presionar levemente la zona dolorida por parte del médico y pedir al paciente que mire para abajo. El dolor se hace entonces inaguantable. Igual ocurre con los pacientes cuando se ponen a leer, lo que obliga a forzar la postura para reducir el ángulo de visión y la consiguiente presión. "Se trata de un nuevo tipo de dolor de cabeza, con un síndrome muy bien definido y con un asiento anatómico preciso, que se soluciona con un tratamiento muy eficaz y simple. Hay muy pocas cefaleas que empiecen en un lugar tan concreto", resume el jefe de Neurología de la Fundación Hospital Alcorcón, Juan Antonio Pareja Grande.

La curación de esta cefalea resulta rápida y barata. Basta con infiltrar un corticoide local, tipo betametasona, en una dosis de un centímetro cúbico directamente en la zona dolorida. Esto supone además de un alivio muy rápido y a la par gradual, que el paciente no tenga que volver a visitar a su médico en periodos de hasta seis y siete meses o incluso en más tiempo. Entonces, si se reproduce este dolor, basta con reproducir la dosis. "El problema con el que se encuentran estos pacientes es que a veces este dolor de cabeza llega asociado a otros, pero, con este tratamiento, se logra un control mucho mayor, con lo que también se mejora su calidad de vida", añade el médico.

Julio Yangüela Rodilla representa la cuarta generación de médicos. Sus predecesores, originarios de La Rioja, se han dedicado a la radiología, con lo que se desvió de la tradición familiar. Pertenece a la Fundación Visión Mundi, que ha fundado una Escuela de Oftalmología en Bolivia.