Unos 200 vecinos de Salt se manifiestan achacando la inseguridad a la inmigración

Una de las reuniones periódicas que los responsables policiales de los Mossos d'Esquadra mantienen con colectivos vecinales se convirtió el pasado martes en el municipio de Salt (Gironès) en una manifestación improvisada contra la inseguridad ciudadana y el incremento de la inmigración. Unos 200 vecinos, entre los que se encontraban los presidentes de las comunidades de vecinos que debían reunirse con los mandos policiales, recorrieron algunas calles de la población para exteriorizar su malestar. Buena parte de los concentrados acabaron participando en la reunión, a la que no estaban convocados representantes municipales.

Los participantes en la concentración mantienen que la masiva presencia de inmigrantes en la población y la concentración de sus negocios en algunas calles han incrementado los conflictos vecinales y la sensación de inseguridad. Entre los vecinos de la zona domina un cierto temor ante la constante afluencia de inmigrantes. Salt tiene una tasa de población inmigrante que supera el 20%. No obstante, el municipio no ha sufrido conflictos graves de convivencia.

Los mandos policiales se comprometieron durante la reunión a incrementar la presencia policial en la zona, aunque advirtieron que las cifras no revelan un incremento de la delincuencia. El consistorio reclama más efectivos policiales y recursos de la Generalitat. La Administración autonómica piensa invertir en la puesta en marcha de medidas estructurales para prevenir la degradación urbana y los posibles conflictos derivados de la masiva concentración de inmigrantes en Salt.

Salt y la ciudad vecina de Girona han anunciado recientemente que optarán conjuntamente a las ayudas de la Ley de Mejora de Barrios en peligro de degradación que promueve el Gobierno de la Generalitat. La inyección económica, que supone entre el 50% y el 75% del presupuesto global del proyecto, se destinará a equipamientos públicos y mejoras urbanísticas. El proyecto conjunto pretende abarcar las principales bolsas de inmigración que se concentran en la frontera de ambas poblaciones.

Los vecinos que se manifestaron el martes, procedentes en su mayor parte de las calles con mayor presencia de los colectivos inmigrantes, amenazaron con convocar nuevas concentraciones si no se incrementa la presencia policial.