Colocada la primera piedra de una de las nuevas torres de la Castellana

Torre Espacio, el primero de los cuatro rascacielos que cuatro empresas diferentes construyen en el paseo de la Castellana, sobre los terrenos de la antigua Ciudad Deportiva del Real Madrid, estará terminado y ocupado por miles de oficinistas en junio de 2007. El resto se inaugurará en los meses posteriores. La capital incorporará así a su urbanismo un perfil casi desconocido hasta ahora, el de las grandes torres de oficinas propias de otras ciudades del mundo, y, con ello, los miedos y las dudas surgidas en los últimos tiempos sobre su seguridad. Unos temores que las empresas pretenden conjurar adoptando en estas estructuras los más modernos sistemas de construcción y evacuación.

El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, colocó ayer una simbólica primera piedra -las obras comenzaron en julio- de la Torre Espacio, la que va más avanzada, propiedad del grupo empresarial Villar Mir (que posee a su vez la inmobiliaria OHL). Medirá 223 metros de altura y tendrá 52 plantas sobre rasante y otras seis de aparcamientos. Se convertirá, junto con los otros tres rascacielos, en "el nuevo techo de Madrid", dijo Ruiz-Gallardón. Ahora ese récord lo ostentan las 43 plantas de la Torre Picasso, que suman 157 metros de altura.

La Torre Espacio, diseñada por el estudio de arquitectos neoyorquino Pei, Cobb, Freed & Partners, parte de una base cuadrada para ascender en una espiral de superficies curvas hasta convertirse en huso en la cúspide. Su rotunda estructura de hormigón armado -que absorberá 50.000 metros cúbicos de hormigón y 8.500 toneladas de acero- mostrará al exterior una doble cubierta de vidrio transparente dotada de un sistema de climatización "de última tecnología", según explicaron ayer Juan Miguel Villar Mir, presidente del grupo empresarial, y José Bruguera, miembro del estudio de arquitectos.

Una corriente de aire circulante entre ambas capas de la cubierta, y el empleo de "persianas inteligentes" que se abren y se cierran dependiendo de la posición y la intensidad del sol garantizarán la ausencia de las "molestas corrientes de aire" y evitarán el sofoco en verano y el frío en invierno, reduciendo el uso de aire acondicionado o calefacción.

Pero donde los responsables de Torre Espacio ponen más énfasis es en el sistema de seguridad y evacuación del rascacielos. Además de generadores autónomos de electricidad y aljibes con capacidad para almacenar 600 metros cúbicos de agua (en previsión de incendios), los arquitectos prometen unas "escaleras diseñadas para evacuar todo el edificio en 30 minutos" y, sobre todo, la creación de "zonas de refugio" aproximadamente cada 12 plantas.

Estos vestíbulos especiales, preparados para descansar durante una eventual evacuación de emergencia en caso de incendio, derrumbe o incidente grave, están construidos con materiales que los aíslan y protegen del fuego durante dos horas. "Se ha comprobado que, en los atentados contra las Torres Gemelas de Nueva York el 11-S, mucha gente murió porque no fue capaz de bajar corriendo todas las escaleras, se agotó y no pudo alcanzar la calle", asegura la gerente de Urbanismo, Beatriz Lobón. El arquitecto José Bruguera explica que las "zonas de refugio" permitirían a los ocupantes del edificio, en una hipotética evacuación, descansar unos minutos cada 12 o 15 plantas sin miedo a morir quemados o asfixiados.

Si los ritmos siguen como hasta ahora, Torre Espacio será el primero de los rascacielos en ser inaugurado. Después vendrán el de la Mutua y el de Repsol, ambos con 250 metros de altura. La más retrasada es la torre de Vallehermoso, que está ya realizando los trabajos previos de preparación del solar pero aún no tiene la licencia definitiva de construcción, según Beatriz Lobón.

El alcalde recordó también que junto a los rascacielos se levantará el tercer Palacio de Congresos y Exposiciones, y bajo ellos un gran anillo subterráneo de distribución del tráfico.