Declarado culpable un preso que mató a un argelino por celebrar el 11-M

Un jurado popular ha encontrado culpable de asesinato a Luis Miguel M., de 39 años, conocido como Hueso Pollo, por haber matado a golpes en el patio de la prisión de Jaén a un recluso argelino que justificó el 11-M y clamó que atentados como ése "tenían que ocurrir todos los días", porque los españoles "eran unos cobardes". El reo, juzgado en la Audiencia de Jaén, justificó su crimen diciendo que es "una persona violenta". De hecho, tras ingresar en prisión por matar a un policía en 1999, mató a un amigo preso en 2002 con un arma casera fabricada con un hueso de pollo afilado, de ahí su apodo.

Los hechos ocurrieron el 27 de abril de 2004, cuando el reincidente y el argelino, de 26 años, salieron al patio. Posteriormente, según declaró el preso ante el tribunal, el argelino le pegó un puñetazo en la sala de televisión. Fue entonces cuando el argelino recordó el atentado del 11-M y dijo que debería repetirse. "No tuve más remedio que defender mi vida, porque las personas como nosotros nunca sabemos que reacción vamos a tener", declaró.

Luis Miguel M. le propinó al otro dos puñetazos en la sien, que lo dejaron inconsciente. Luego le golpeó la cabeza contra el suelo y saltó sobre ella. El agredido falleció el 3 de mayo, tras permanecer ingresado con traumatismo craneoencefálico severo en la UCI del hospital Neurotraumatológico de Jaén. "Me obcequé y perdí el control", dijo Luis Miguel.

Tercer asesinato

El fiscal pide 20 años para el reo por homicidio con la agravante de reincidencia, mientras que su defensa pretende que la pena se quede en 17 años. El preso estaba considerado como "muy peligroso" desde 1995. De hecho, el 30 de octubre de 1999, tras salir de prisión (en la que había estado en 30 ocasiones), asesinó en Granada al agente del Cuerpo Nacional de Policía Antonio Domínguez de una puñalada en el corazón e hirió al también policía Francisco Fernández. Fue condenado a 25 años.

Posteriormente, en mayo de 2002, mató en el economato de la cárcel de Aranjuez (Madrid) al preso Gregorio Sánchez Fernández, de 37 años, muy amigo suyo. Le asestó 20 pinchazos con un puñal fabricado con un hueso de pollo. El jurado, según la agencia Efe, apenas necesitó ayer 40 minutos para declarar culpable a Luis Miguel.

Por otro lado, el 15 de junio comenzará en la Audiencia de Navarra el juicio con jurado por el crimen de Ángel Berrueta. En el banquillo de los acusados se sentarán un policía, su esposa y su hijo, acusados del asesinato del comerciante pamplonés, que se negó a colocar un cartel contra ETA en su local el 13 de marzo de 2004, dos días después del 11-M, informa Europa Press. El fiscal pide una pena de 18 años para el padre y para el hijo.