Rajoy considerará que Zapatero rompe el Pacto si no pide la ilegalización de EHAK

La ruptura formal del Pacto Antiterrorista parece tener ya fecha fija: el martes. El líder del PP, Mariano Rajoy, afirmó ayer que si ese día el PSOE no respalda en el Congreso dos resoluciones del PP sobre terrorismo, él considerará que el Gobierno ha roto el Pacto. La primera "reafirma los elementos esenciales del Pacto" y la segunda pide al Gobierno que inste a la ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas. Si el PSOE, como es seguro, no respalda estas exigencias del PP, se producirá, según Rajoy, "la constatación formal" de la ruptura e imputará esa responsabilidad al Gobierno.

"Si el presidente no apoya dos mociones sobre terrorismo, una que reafirma los principios de la lucha contra el terrorismo y otra que pide la ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas, se producirá la constatación formal de que, desgraciadamente, el PSOE y el presidente del Gobierno prefieren pactar la política antiterrorista con otros", proclamó Rajoy. Según él, "si el Gobierno no quiere estar en el Pacto contra el Terrorismo y no quiere evitar que ETA esté en el Parlamento vasco, el Gobierno habrá roto el Pacto".

El PP intentó dar la máxima solemnidad a una rueda de prensa de Rajoy para anunciar tres de las quince resoluciones que este partido defenderá el martes en el Congreso como colofón al debate sobre el estado de la nación: "Dos sobre terrorismo y una sobre España, que son los dos temas más importantes que tienen planteados en este momento los españoles, junto con la inmigración". La primera sobre el terrorismo incluye una defensa de los tres principios clave, a juicio del PP, del Pacto Antiterrorista y la reclamación al Gobierno para que ponga en manos de los tribunales todos los indicios que apuntan "lo que todo el mundo sabe". Es decir, que EHAK "es una nueva careta de ETA".

Plante

Rajoy convocó a la prensa para despejar cualquier duda de que su discurso del miércoles fuera sólo retórica. No. Es la posición en la que él y su partido han decidido plantarse. Justificó incluso su acusación al presidente de haber "traicionado a los muertos". Preguntado por esa polémica frase, afirmó: "Le pedí al presidente que no cambie de dirección en la política antiterrorista y no traicione a los muertos. ¿En qué los ha traicionado? Si ETA recibe un precio como consecuencia de una negociación, matar habrá valido para algo. Eso es exactamente así. Si ETA recibe un pago, y ya ha recibido un anticipo para estar en el Parlamento vasco, eso es una traición a los muertos. ¡Qué es, si no! Yo le pido que no los traicione".

Rajoy esgrimió los 9,7 millones de votos que obtuvo el PP el 14-M y su experiencia como ministro del Interior en los Gobiernos de José María Aznar, al exponer cuál es la "esencia" del Pacto: "La idea esencial es que los terroristas tengan la seguridad absoluta de que, gobierne quien gobierne, no se procederá a ninguna negociación política que cambie el fin del chantaje por el logro de objetivos políticos para los terroristas", afirmó. "Además, el Pacto se basa en dos principios: contra el terrorismo hay que utilizarlo todo con el único límite de la ley. Y ETA no es sólo quien dispara o coloca un coche bomba. ETA es quien le apoya o le da cobertura política, como hace Batasuna". Estos dos principios no aparecen eran las dos ideas que machaconamente repetía el Ejecutivo del PP al argumentar su política antiterrorista.

Como muestras de que ha sido el Gobierno quien ha "incumplido" el Pacto, Rajoy tildó a EHAK de "brazo político de ETA" y recriminó al secretario general del PSE, Patxi López, haberse reunido esta semana con las diputadas de ese partido. Preguntado por la oferta de "mano tendida" que le hizo Zapatero, replicó: "No hace falta que el presidente del Gobierno me tienda la mano, él tiene en su mano cumplir el Pacto". Y sobre si acudiría a una reunión con el presidente, afirmó que sólo irá para preguntar qué son esas mesas de partidos y de la pacificación de las que habla Patxi López y para decirle que ya no se fía de él, porque le "ha engañado".

Primer engaño

El primer engaño se produjo, según Rajoy, el 14 de enero, tras su última reunión en La Moncloa. Entonces, Rajoy mantiene que el presidente aceptó que se pactarían con el PP las reformas en los estatutos y la Constitución. "Después Carod Rovira aclaró que con el PP se dialoga pero no se pacta". Por eso, la resolución sobre España reclamará que las reformas de Estatutos requieran el respaldo de dos tercios del Parlamento para ser aprobadas. Y, sobre la reforma del sistema de financiación, exigirá la misma unanimidad que tiene el modelo actual. "Si no hay unanimidad, es que van a ganar unas autonomías frente a otras. Eso no es justo ni admisible", remachó.