"El turismo genera identidades más ricas"
El alcalde de Manilva, Pedro Tirado, apuesta por el golf como reclamo
El viernes se iza en la playa de Puerto de la Duquesa, junto al puerto deportivo, la segunda bandera azul que obtiene el municipio costero de Manilva (Málaga). Pedro Tirado (independiente) es el alcalde de este pueblo limítrofe con la provincia de Cádiz que se asoma al Mediterráneo entre viñedos. El turismo es su principal fuente de ingresos.
Pregunta. ¿Cree que el modelo turístico de sol y playa está agotado?
Respuesta. No, es un modelo que sigue funcionando. Lo que ocurre es que hay que diversificar para romper la estacionalidad de este tipo de turismo. Hay que diversificar con el turismo residencial, con el hotelero y, sobre todo, con el turismo de golf.
P. ¿Cual es el principal atractivo de Manilva?
R. Pues que, a pesar del boom urbanístico y turístico que se ha dado en los últimos años, Manilva sigue manteniendo la calidad de vida de un pueblo. Además, cuenta con un paisaje totalmente distinto al del resto de la costa: aquí se puede contemplar un campo de viñedos a sólo 100 metros de la orilla del mar.
P. ¿Qué fórmula aplican para conjugar el desarrollo turístico y el mantenimiento de esta vida de pueblo?
R. No creo que exista una fórmula perfecta. Nosotros siempre hemos querido que Manilva se desarrolle y por eso, en su momento, decidimos abrir las puertas a los inversores teniendo como meta principal el golf, porque es el tipo de turismo que tiene que romper la estacionalidad.
P. ¿Cómo han atraído a los promotores?
R. Lo primero que exigen inversores y urbanizadores es seguridad jurídica. Por eso, desde el Ayuntamiento, hemos hecho mucho hincapié en garantizarla: desde el año 2000 hemos tenido gobiernos estables, con mayoría absoluta y con una paz social importante.
P. ¿En qué consiste esa seguridad jurídica?
R. La seguridad jurídica es la paz social, la estabilidad que da garantías al promotor o al urbanizador de que su proyecto se llevará a buen término. El dinero siempre es miedoso y busca este tipo de amparo.
P. ¿Qué modificaciones piensan introducir en la normativa?
R. En Manilva vamos a hacer una revisión del PGOU que será un lujo dentro de lo que hay en la Costa del Sol, y eso a los promotores ya les da una cierta seguridad. Y si además se encuentran con un equipo de gobierno que tiene una mayoría suficiente y que no depende de acuerdos puntuales ni nada por el estilo, pues esa seguridad aumenta.
P. ¿Cuales son las líneas maestras de esta revisión del PGOU?
R. Uno de los objetivos más importantes es reducir la edificabilidad. Creemos que para poder seguir siendo un municipio turístico con expectativas tenemos que primar la calidad sobre la cantidad, además de generar mucho equipamiento público para que la futura Manilva tenga cubiertas sus necesidades lúdicas culturales y sanitarias.
P. ¿Cómo alcalde qué prefiere, la edificación extensiva o intensiva?
R. Creo que hay un término medio para todo. Ni ocupar todo el territorio, pues entonces no tendríamos zonas de expansión ni zonas verdes, ni tampoco excedernos en alturas. El plan va a marcar un máximo de tres alturas en todo el territorio y unas edificabilidades bajas, con unas líneas de ocupación que no sobrepasen nunca el 50% del territorio.
P. ¿Qué aspectos positivos y negativos destacaría del turismo?
R. El turismo es aquí la principal fuente de ingresos, hasta el punto de que, hoy, en Manilva el paro es prácticamente cero gracias al sector turístico. Por contra, el turismo te hace perder un poco tus señas de identidad, aunque también es cierto que genera otras mucho más ricas. Sólo los melancólicos están en contra del turismo.
P. ¿Cómo son las comunicaciones de Manilva con el resto de la Costa del Sol?
R. Hasta hace cuatro años Manilva estaba aislada del resto de la Costa del Sol. El desdoblamiento de la carretera Nacional 340 y la construcción de la autopista han significado un salto cualitativo y cuantitativo. Nos ha incorporado de lleno en la costa y ha facilitado el acceso por la zona de Cádiz, que estaba completamente cerrada y colapsada. De todas formas creo que el litoral malagueño necesita más infraestructuras de las que hoy tiene.
Crecimiento acelerado
Manilva tiene unos 10.000 habitantes, cifra a la que cada verano se añaden unos 7.000 visitantes. El turismo nacional es el primero que descubrió las bondades de este pueblo costero, pero hoy la colonia más numerosa es la inglesa. Este crecimiento ya está salpicando al pueblo con los problemas que afectan al resto de la Costa del Sol: dos empresas promotoras que han invertido en Manilva han sido intervenidas judicialmente por su relación con la trama de blanqueo de capitales descubierta en marzo en Marbella.
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