Una promotora proyecta construir 4.600 viviendas en Riba-roja y otras 4.000 en Vilamarxant

El grupo Llanera presentará en los próximos días en los Ayuntamientos de Riba-roja y Vilamarxant (Camp de Túria), ambos del Partido Popular, sus proyectos: dos urbanizaciones de 4.600 y 4.000 viviendas, ambas con campo de golf. El primer PAI afecta a una zona próxima al valle de Porxinos, donde el Valencia CF proyecta construir su nueva ciudad deportiva y 2.800 viviendas. Este plan ya ha sido aprobado por el Consistorio ribarrojense, pero todavía no ha sido homologado por la Consejería de Territorio y Vivienda. Como tampoco los otros tres que tramita el ayuntamiento: uno de 1.600 viviendas y otros dos de 350 y 830.

Riba-roja duplicará su número de habitantes (17.000) si cuajan los cinco proyectos en marcha. Lo mismo ocurrirá en Vilamarxant, que suma 5.800 vecinos. La oposición, encabezada por el grupo socialista y EU-L'Entesa, ha advertido del "pernicioso" efecto que causará en el parque natural de Les Rodanes la construcción de las miles de viviendas previstas.

Benasau tramita una urbanización que multiplicará por 20 su número de habitantes

Entretanto, el Ayuntamiento de Benasau tramita un proyecto que prevé la recalificación de casi un millón de metros cuadros de suelo rústico (una zona de huerta del valle del río Penàguila, entre de la sierras de Aitana y Serrella) para construir 1.320 nuevas viviendas, que multiplicaría por 20 la población (195 vecinos) de está pequeña localidad de L'Alcoià.

El programa urbanístico de Benasau, impulsado por la mercantil Segoelx Promociones y Construcciones, SL, afecta a más de 830.000 metros cuadrados de superficie y prevé la transformación de 660.000 metros cuadrados de terreno rústico y de interés agrícola o forestal.

A mediados de 2004, los propietarios de los terrenos donde se prevé levantar la urbanización, vincularon la génesis del proyecto con el acceso a la alcaldía de Benasau de la familia Oltra, encabezada por la alcaldesa; su hermano, primer teniente; y otros dos concejales, los cónyuges de los primeros. Los cuatro fueron elegidos en la candidatura del Bloc. Los dueños del suelo denunciaron que se vieron obligados a vender sus bancales a un anónimo promotor a precio de suelo rústico. Los propietarios implicaron a la alcaldesa, María Gloria Oltra, en la operación al asegurar que la primer edil les animaba a vender. El equipo de gobierno negó entonces las acusaciones de los dueños del suelo y que "oficialmente" se hubiera presentado en la Corporación proyecto alguno en ese sentido. El grupo Ecologistas en Acción del País Valenciano elevó una queja al Síndic de Greuges denunciando el negativo impacto ambiental del proyecto. El 24 de septiembre de 2004, el Ayuntamiento contestó al Síndic lo siguiente: "Hasta la fecha, en este Ayuntamiento no se ha tramitado ningún proyecto sobre un PAU".

La publicación del PAI en el DOGV ha reactivado el rechazo de los vecinos y grupos ecologistas. Los dueños del suelo y el colectivo Ecologistas en Acción cuestionan la supuesta ignorancia del Ayuntamiento sobre el PAI. "Es dudoso

[que en septiembre de 2004 no hubiera proyecto urbanístico y su publicación en junio de 2005] que sea verdad, pues elaborar un PAI de esa envergadura lleva meses o años y la consulta con el Ayuntamiento se hace antes de mover ficha y encargar unos trabajos a arquitectos y biólogos", subraya una nota de Ecologistas en Acción.

Ecologistas en Acción y el colectivo local Colla Ecologista La Carrasca han iniciado una campaña de información entre los vecinos para que se sumen a su documento de alegaciones. A parte del valor ecológico y paisajístico de la vaguada que pretende ocupar la futura urbanización, los ecologistas denuncian que el proyecto carece de alternativas para garantizar el abastecimiento de agua.