Murales políticos recobrados

Las pinturas murales del Saló de Corts del Palau de la Generalitat han recobrado su esplendor tardorrenacentista tras la restauración iniciada en septiembre de 2003 y en la que se ha invertido 331.000 euros. El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y el director general de Patrimonio, Manuel Muñoz, presentaron ayer la intervención de los ocho paneles al óleo que "constituyen un testimonio político e histórico de la Comunidad Valenciana", en palabras del primero. De hecho, los óleos de finales del siglo XVI retratan un centenar de figuras a tamaño natural que representan los estamentos que regían la sociedad valenciana: el político (con seis diputados de la Generalitat), el eclesiástico (17 representantes de la Iglesia) y el militar (con los denominados "nobles caballeros"). También tiene su reflejo los jurados reales para la ciudad de Valencia y los representantes de ciudades alicantinas como Orihuela, Callosa o Guardamar del antiguo Reino de Valencia, como subrayó Camps.

Al entrar en la estancia donde se celebra el 9 d'Ocubre, el visitante encuentra al fondo el panel de la Generalitat, realizado por Joan Sariñena en 1592, donde aparecen los seis diputados de la Generalitat. A ambos lados de la Sala aparecen reflejados, a la derecha, el brazo eclesiástico, pintados por Vicente Requena, mientras que, en la pared de enfrente, Francesco Pozzo pintó en 1592 las ciudades y villas reales

La coordinadora de la restauración, Mar Sabaté, comentó que las pinturas estaban seriamente dañadas por la humedad. La resturadora Sabaté valoró la riqueza de las pinturas murales, que recogen todo tipo de detalles y retratan el estado de ánimo de los personajes. Fueron realizadas al óleo, "una técnica pictórica novedosa en su época y de altísima tecnología, que estaba desbancando al fresco, más común". "Para representar la carne, nada mejor que el óleo", añadió Sabaté, que apoyó su afirmación en una cita del artista del expresionismo abstracto americano Willem de Kooning.