El Consell ultima la constitución con los rectores de una red de parques científicos

"El parque científico para Alicante es necesario, ya está bien de perder el tiempo, debemos exigir que se haga ya", comentó a este periódico el empresario y presidente de la Fundación Universidad-Empresa, Eliseo Quintanilla, que acudió el viernes por la tarde a una jornada de debate organizada por el Consejo Social de la Universidad de Alicante. Allí se dieron cita un reducido grupo de empresarios, miembros del Consejo Social, profesores y ningún representante municipal del Ayuntamiento de Alicante.

Felipe Romera, gerente del parque científico de Málaga explicó que en España existen 19 parques científicos en marcha y 40 en desarrollo, y detalló el amplio abanico de modelos de este "sistema virtuoso de innovación". La base de cualquier parque es el entorno universitario y las empresas de base tecnológica. El principal problema para su ejecución, según Romera, es la gestión del suelo porque "se tarda más de cinco años en recalificar los terrenos", por eso el impulso de las Administraciones es "fundamental". El rector de Alicante, Ignacio Jiménez Raneda dijo que "la Universidad debe crear conocimiento y transferirla a la sociedad", y para eso se requiere un parque científico en el que puedan colaborar los 1.100 investigadores del campus de Sant Vicent, sus 134 grupos de investigadores y trabajar con algunas de las 941 empresas que ya han contratado servicios específicos a la Universidad.

Pero la jornada de debate puso sobre el escenario dos modelos diferentes, pero complementarios de parque. Uno es el que defiende la Generalitat basado en incubadoras de empresas, y el otro más científico y tecnológico por el que apuesta el Ministerio de Educación y Ciencia.

Salvador Ordóñez, secretario de Estado de Universidades y ex rector de Alicante, reconoció que hay que "dar un paso definitivo" para la constitución del parque científico de Alicante y desgranó las ayudas en general que el Ministerio otorgará este año: 200 millones de euros en forma de préstamos, multiplicar por 20 las asignaciones del año anterior y una inversión de 1.000 millones en esta legislatura para infraestructuras tecnológicas.

Ordóñez recordó cómo al principio las iniciativas impulsadas por los gobiernos autonómicos empezaron a llamarse parques tecnológicos y los promovidos por las universidades científicos. "Hoy esa dicotomía no tiene sentido, porque existe una fuerte simbiosis entre la universidad, la empresa y la tecnología en un mismo espacio de excelencia, el cual actúa como centro de gravedad tecnológico-empresarial".

El consejero de Empresa, Universidad y Ciencia, Justo Nieto, anunció la constitución de la Red de Parques Científicos de la Comunidad Valenciana. El modelo de Nieto apuesta por un gestión de los parques científicos "ajena a lo universitario en cuanto que la universidad estará involucrada de manera directa en su dirección, pero la gestión estará vinculada con el empresariado". Por eso la Red de Parques Científicos "se revela como una estructura fundamental tanto para generar empresas desde la vanguardia del conocimiento como para hacer emerger una nueva clase de emprendedores universitarios".

Nieto explicó la diferencia entre un parque tecnológico en el que "la empresa ideologiza la ciencia", como sería el modelo de Paterna, y el científico "en el que es la universidad la que genera ideas y ciencia para la empresa". Este segundo modelo es por el que apuesta la Generalitat. El acuerdo con los rectores permitirá a las universidades contratar a tres o cuatro personas para que durante unos meses gestionen la puesta en marcha de estos parques, también ofrecerán instalaciones gratuitas a las empresas que utilicen los viveros y ayudas para financiar la seguridad social de los investigadores. Nieto auguró que los parques científicos que respalda en colaboración con las universidades "contribuirán al desarrollo económico y al desarrollo sociocultural".

Ricardo Ferré, presidente del Consejo Social de Alicante y organizador del debate, no quiso desaprovechar la ocasión de tener sentados en la misma mesa a los principales responsables de la puesta en marcha del parque científico de Alicante, y al final interpeló a cada uno de ellos. El rector, Ignacio Jiménez Raneda, admitió dificultades en la adquisición de los terrenos, pero confió que con el impulso de las Administración se pueda superar ese escollo. El secretario de Estado, Salvador Ordóñez que confesó que coincidió con el avión con Eduardo Zaplana "que también apoya un parque para Alicante", recordó todas las facilidades fiscales que ha aprobado el Ministerio para su desarrollo y el incremento presupuestario, y Justo Nieto concluyó su intervención diciendo "ahora o nunca", animando así a los presentes a dar un impulso al proyecto de Alicante que se inició en 1998.