Gotovina se declara inocente ante el Tribunal de La Haya

Ante Gotovina se declaró ayer inocente de siete cargos de crímenes de guerra y contra la humanidad cometidos en 1995, durante las guerras de los Balcanes, ante el Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY). El general croata, detenido el pasado miércoles en Tenerife, está acusado de persecución, asesinato, saqueo, destrucción de ciudades, deportación, desplazamiento a la fuerza y trato inhumano de civiles serbios.

Todo ello se produjo en el curso de la Operación Tormenta, llevada a cabo entre julio y noviembre de 1995 en la zona sur de la región croata de Krajina. Al menos 150 de sus habitantes serbios habrían perecido por orden directa de Gotovina. Otros 200.000 serían luego deportados. Según Carla del Ponte, fiscal jefe del TPIY, el acusado y el antiguo presidente croata, Franjo Tudjman, "formaron una asociación de malhechores dedicada a la limpieza étnica de la población serbia de Krajina".

Gotovina apareció compuesto y bien vestido ante los jueces ayer en La Haya. Sólo habló para confirmar su identidad y decir que estaba bien. La lectura del acta de acusación se prolongó durante casi dos horas en un trámite legal de gran valor simbólico. Del Ponte llevaba cuatro años tras su pista, y ahora querría recibir en La Haya al líder serbobosnio Radovan Karadzic, y a su jefe militar, Ratko Mladic.

Acusados de genocidio por la matanza de Srebrenica, ambos llevan huidos una década. Se da la circunstancia de que el serbio Milan Martic será juzgado a partir de hoy también por el TPIY. Sus crímenes, contra croatas y musulmanes, habrían sido cometidos en el mismo escenario que Gotovina: la región de Krajina.