_
_
_
_

Las divisiones en el Consell impiden el aumento de sueldo a 100.000 empleados de la Generalitat

La revisión salarial se acordó en octubre pero está pendiente del trámite en un decreto

El pasado mes de enero subió la factura de la luz. Y la del gas. Pero el aumento de sueldo pactado en octubre pasado para los cerca de 100.000 empleados públicos al servicio de la Generalitat Valenciana no se hizo efectivo. Ni será efectivo en febrero. Las diferencias entre los consejeros de Hacienda, Gerardo Camps, y Administración Pública, Miguel Peralta, han paralizado la mecánica burocrática. La modificación de un decreto se ha complicado durante meses porque exige la colaboración de dos consejeros que encarnan el último episodio del enfrentamiento entre campistas y zaplanistas.

UGT culpa a Hacienda y CC OO apela al vicepresidente para que ponga orden

"Es un trámite que se ha retrasado por cuestiones de burocracia", explicó ayer un portavoz oficial de la Consejería de Administración Pública, "y se ha complicado porque es una cosa entre dos consejerías". La misma fuente explicó que "esta mañana", (por ayer), llegó "la firma de Economía" que requería Administración Pública para remitir el decreto correspondiente al pleno del Consell para su aprobación. Dada la premura de tiempo, el asunto no podrá tratarse en la reunión plenaria de hoy, según la misma fuente, y los empleados de la Generalitat tampoco percibirán el alza salarial en febrero.

Un portavoz de Hacienda, por su parte, comentó que la elaboración del decreto en cuestión es "cosa de Función Pública". El decreto que debe modificarse fue propuesto por Administración Pública y firmado por el presidente de la Generalitat en 2004.

Pero Gonzalo Fernández y Juan Cruz, portavoces de las secciones de Función Pública de UGT y CC OO, respectivamente, coinciden al señalar que las disputas entre campistas y zaplanistas son la clave del retraso.

Fernández, en nombre de UGT, advierte de que cargará contra Camps si no se agiliza el aumento salarial. "Todos contra Hacienda porque el acuerdo se alcanzó en la mesa que preside Gerardo Camps y se negoció con José Manuel Vela, secretario autonómico", explica Fernández.

Cruz, en nombre de CC OO, dice que pedirá la intervención del vicepresidente del Consell, Víctor Campos. "No vamos a entrar en la guerra de campistas o zaplanistas porque la empresa es la misma", subraya Cruz.

Pero no lo parece. Cuando los empleados públicos de la Generalitat reclamaron al Consell, a principios del pasado otoño, que trasladara a los presupuestos de 2006 el acuerdo alcanzado por el Gobierno central para los funcionarios del Estado en el Foro del Diálogo Social, que congrega a patronal y sindicatos, Peralta se ofreció a resolver el problema.

El caso coincidió con la revisión de los acuerdos del Plan Valenciano por el Crecimiento y el Empleo (Pavace), el foro de diálogo social de ámbito autonómico, que incluye una mesa específica para empleados públicos.

La mesa en cuestión se convocó, por primera vez en la historia del Pavace, y los representantes de Función Pública de UGT y CC OO cerraron el acuerdo definitivo con José Manuel Vela, secretario autonómico de Hacienda. El pacto recogía el alza salarial de tres puntos acordada para los funcionarios del Estado y un punto adicional para los empleados de la Generalitat.

La negociación al margen de la Mesa General de Función Pública provocó el malestar del resto de sindicatos de funcionarios, que no están representados en el Pavace. También impidió a Peralta resolver el problema.

El acuerdo se plasmó en la ley de presupuestos para 2006 que se remitió a las Cortes a finales de octubre, otro hito histórico.

UGT solicitó en noviembre a Hacienda que acreditara ante Administración Pública la masa salarial de los empleados públicos para agilizar la redacción del decreto pendiente. Camps remitió a Peralta en enero los detalles sobre el alza de la masa salarial de los empleados de la Administración general, pero omitió el personal de varios organismos públicos, un detalle que recortaba un 10% el montante total. Una de tantas zancadillas a la que asistieron estupefactos los representantes sindicales de los funcionarios.

Francisco Camps, ayer, en las Cortes Valencianas.
Francisco Camps, ayer, en las Cortes Valencianas.SANTIAGO CARREGUÍ

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_