'Un lugar en el mundo' y 'Crimen ferpecto'
EL PAÍS presenta mañana, jueves, por 2,95 euros, un filme de Adolfo Aristarain, y el viernes, por 5,95 euros, una enloquecida comedia de Álex de la Iglesia
Un clásico del cine argentino de hace 14 años y una modernísima comedia española de hace sólo dos coinciden esta semana en la colección Cine en Español. Adolfo Aristarain conquistó la Concha de Oro del Festival de San Sebastián en 1992 con Un lugar en el mundo, y tuvo una accidentada candidatura al Oscar, mientras que Álex de la Iglesia fue propuesto como mejor director en los galardones europeos de 2005 por su comedia Crimen ferpecto, y la actriz Mónica Cervera fue igualmente destacada en candidaturas y premios.
Tras haber sido seleccionada por la Academia de Hollywood como mejor película de habla no inglesa, Un lugar en el mundo tuvo que ser retirada ya que había sido presentada bajo bandera uruguaya, siendo en realidad una producción argentina. La Academia exige que las películas hayan sido dirigidas, escritas, producidas e interpretadas por personas del país que las presentan. Como el Instituto de Cine argentino había elegido otra película para competir en los Oscar (que, irónicamente, no fue seleccionada por Hollywood), Aristarain optó por cambiar la nacionalidad de su película dado que tanto la coguionista Kathy Saavedra como el joven actor Gastón Batí son uruguayos. La estratagema, sin embargo, no dio el resultado apetecido, aunque Un lugar en el mundo salió reforzada con el honor de haber sido una de las cinco seleccionadas como mejores del año. En los premios Goya recibió el correspondiente a mejor película extranjera de habla hispana.
Según escribió Ángel Fernández-Santos, Un lugar en el mundo es una película "que roza la perfección" a través de una "ficción pura que nos orienta hacia la verdad de lo que les pasa a infinidad de gentes de ahora y de cualquier parte, con la precisión de un documento y la penetración de un poema". Esas gentes, en descripción de Gary Kamiya en Examiner, son "un pequeño grupo de personas que no sólo intenta vivir, sino vivir con un fin, a pesar de que su causa esté perdida... Un lugar en el mundo trata de política, y de lo que les pasa a los sueños cuando se ven confrontados con la realidad". Sueños interpretados por Federico Luppi, José Sacristán, Cecilia Roth, Leonor Benedetto, "todos ellos formidables", en opinión de E. Rodríguez Merchante en Abc, "aunque el mérito fundamental de la película reside en la gran capacidad de Aristarain para entretejer un texto lleno de inteligencia y matices", texto que, según Antonio Weinrichter, "tiene mucho de género clásico, pudiéndose describir la película como un western ambientado al sur de Río Grande".
Mientras Aristarain es un director de corte clásico, Álex de la Iglesia "es el cineasta más incombustible, gamberro y freak de nuestro país", en definición de Emilio Martínez Borso en Miradas de Cine, "y en Crimen ferpecto vuelve a cargar las tintas con la entrega de una nueva broma cinematográfica, mucho más seria de lo que a priori se pueda deducir". A M. Torreiro le pareció que esta película contiene "una mirada mordaz sobre la vida común, un vitriólico análisis de la cortedad de miras de un empleado de grandes almacenes (Guillermo Toledo), la vida cotidiana en uno de esos espacios en los que pasamos tantas horas de nuestra vida, sin pararnos a pensar lo que aquí se nos propone que veamos. En su primera parte, Crimen ferpecto acumula bofetadas y carcajadas para dar y regalar, en un implacable crescendo dramático-festivo que tiene su culminación en la tormentosa relación que establecen el bello (es un decir) Guillermo Toledo y la fea Mónica Cervera, algo así como una revisitación del mito de la bella y la bestia, sin que se tenga muy claro quién es quién".
Sergi Sánchez opinó en La Razón que "Crimen ferpecto es una locura. Como debe ser. La comedia se transforma en una fábula negra, negrísima, sobre la dependencia emocional y la insólita mediocridad de nuestro entorno. No hay justicia posible en un mundo sin códigos morales, viene a decirnos De la Iglesia en esta comedia modélicamente escéptica", que Fernando Méndez-Leite aconsejaba desde Fotogramas "a cuantos quieran reírse a carcajadas durante 90 minutos". Para Rodríguez Merchante en Abc, "Crimen ferpecto cuenta cosas, relaciones, sentimientos y hechos realmente tremendos y despiadados, lo que hace más curioso aún el que uno no pueda evitar reírse como una hiena en varios momentos de la película".
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.