Operativo 'ninja'

Los investigadores europeos han logrado reconstruir los pasos que seguían los espías para preparar a un preso para su traslado. El detenido llegaba al aeropuerto con los ojos vendados. Entre cuatro y seis agentes realizaban la "revisión". Todos vestían de negro (incluyendo guantes y pasamontañas, como ninjas, según los testigos) y actuaban con disciplina. Los agentes no hablaban entre sí, sólo se comunicaban, si hacía falta, mediante gestos manuales.

Por la fuerza o mediante la intimidación, el detenido era esposado de pies y manos. Una vez inmovilizado, se le desnudaba cortándole toda su ropa (incluyendo la interior) con navajas y tijeras con precisión quirúrgica. Cada cavidad del cuerpo era minuciosamente revisada por los agentes. El detenido era entonces fotografiado completamente desnudo. Casi de inmediato, se le suministraba un calmante, generalmente por vía rectal, según los testimonios. Algunos dicen que fueron drogados.

Luego era vestido con un pañal para la incontinencia, una faja y, a veces, un mono. Los oídos del detenido eran tapados, generalmente con unos cascos, y luego se le cubría su cabeza con una bolsa de tela sin agujeros a la altura de la nariz, por lo que los apresados respiraban con dificultad.El detenido era entonces forzado a subir al avión y ubicado en una posición de difícil movilidad.