Empieza la vendimia en el Penedès sin acuerdo sobre el precio de la uva
Las lluvias de invierno han hecho posible afrontar la sequía sin grandes problemas
Los viticultores del Penedès empezarán hoy a trabajar de lleno en la vendimia, aunque algunos ya empezaron la semana pasada con las variedades más tempranas. Este año se espera un notable aumento de la producción. Sobre la mesa permanece latente la reivindicación de los payeses, que exigen que las empresas elaboradoras paguen un precio "más digno" por su producto.
La vendimia tiende a adelantarse cada año unos días, por lo que el macabeo, una de las variedades tradicionales del Penedès, se empezará a recolectar a mediados de la semana que viene. Algunas bodegas (como las de Torres, Raventós Blanc y Juvé y Camps) ya han abierto sus puertas para recibir los primeros tractores con la uva más temprana. La vendimia se presenta sana y de calidad, gracias a las lluvias del invierno, que han permitido a las cepas aguantar la sequía de los últimos meses sin estragos. En cuanto a la producción, se apunta que en las zonas pertenecientes a la Denominación de Origen Penedès se puede llegar a los 240 millones de kilos de uva, una cifra considerada normal. La nota negativa del inicio de la vendimia ha sido el granizo que el martes pasado cayó en el Baix Penedès y afectó a 700 hectáreas de vid, lo cual supone el 15% del total de superficie de viña de la comarca.
El precio que las empresas elaboradoras pagarán por la uva vuelve a estar en el epicentro de un debate. La cosecha ya ha empezado y aún no se han fijado los precios, hecho que juega en contra de los intereses de unos viticultores que llevan unos años denunciando que están vendiendo su producto por debajo del precio de coste. La vendimia del año pasado fue escasa, de apenas unos 187 millones de kilos, debido a la sequía. Eso ha facilitado que en estos momentos ya no haya excedente de uva para la elaboración de cava (alrededor del 85% de la producción del Penedès se destina al espumoso), aunque sí lo hay de las variedades negras, poco significativas en la zona. Josep Esteve, uno de los representantes del sindicato agrario Unió de Pagesos en el Alt Penedès, considera que "lo lógico es pensar en un aumento del precio".
No se han reunido las mesas de negociación en las que se deberían haber pactado los precios de la uva negra por una parte y los de las variedades blancas por otra. No será hasta dentro de una semana cuando empezará a perfilarse la tendencia de los precios que pagarán las empresas. De todos modos, el director de la patronal Unió Vinícola del Penedès, Joan Gil, asegura que los precios serán muy similares a los del año pasado y sólo en algunos casos serán levemente superiores. Gil cree que este año no ha habido "motivos especiales que animen a las empresas" a participar en las mesas de negociación. En su opinión, el sector elaborador está inmerso en un proceso de reestructuración que les permitrá ajustar al máximo sus costes de producción en un mercado altamente competitivo.
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