Los alcaldes apoyan el voto extranjero

Andalucía cuenta con 420.207 residentes extranjeros, un 5,4% de la población. Aunque en el conjunto andaluz no es un porcentaje de peso, la desigual distribución de los extranjeros, que se concentran mayoritariamente en Málaga y Almería, invita a suponer que una ampliación del derecho al voto de los extranjeros en las elecciones locales tendría efectos políticos en aquellos municipios que cuentan con más vecinos llegados de fuera del país. Seis localidades (las almerienses Mojácar y Níjar y las malagueñas Fuengirola, Manilva, Mijas y Torrox) cuentan con más de un tercio de residentes extranjeros en sus padrones. Los alcaldes de distintas formaciones consultados apoyan que se otorgue el derecho de sufragio para facilitar la integración.

Gabriel Flores es el alcalde de Mojácar, una localidad de la costa almeriense que puede vanagloriarse de atraer más extranjeros que ninguna. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), los extranjeros residentes alcanzaron el 53% de la población en 2005. Flores (PSOE) defiende que se amplíe el derecho al voto que ya poseen los ciudadanos comunitarios: "Veo con buenísimos ojos que se amplíe el voto a toda la gente que trabaja aquí, la integración hay que demostrarla con hechos".

El consejo de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) también debatió sobre la ampliación del voto a extranjeros, planteada por PSOE e IU en una proposición no de ley presentada en el Congreso de los Diputados. La opinión es favorable, según el alcalde de Algeciras y vicepresidente segundo de la FAMP, Tomás Herrera (PSOE). "Había una posición común, que yo recuerde. Los inmigrantes forman parte de la ciudad y tienen que participar en el gobierno, una vez que están regularizados es importante para facilitar la integración".

En el consejo municipalista de la FAMP se sienta como vocal el alcalde de Lepe, Manuel Andrés González (PP), que también considera que es una medida positiva aunque la matiza: "Podría ser muy buena, pero es una medida que no hay que tomar a la ligera, y que hay que estudiar con calma y sin precipitaciones", informa Manuel Albert. El regidor de Lepe, donde los inmigrantes empadronados rozan el 10%, reclama "consenso" sobre esta iniciativa y defiende que se apliquen dos supuestos: "Ha de existir reciprocidad de derechos con los países de origen de esos inmigrantes y debería comprobarse que ésta reside de manera regular y por un periodo de tiempo suficiente en el pueblo". En su opinión, no tendría gran impacto político en su municipio. El alcalde de Puerto Real (Cádiz) y vicepresidente tercero de la FAMP, José Antonio Barroso (IU), se ha mostrado "totalmente a favor" de la concesión "sin limitaciones" del derecho al voto a los inmigrantes, informa Francisco José Román. "No entiendo por qué una persona que disfruta de una estancia regulada, con derechos adquiridos, y miembro activo de la comunidad no va poder votar con plena libertad", manifestó. José Antonio Barroso cree que no afectaría "mucho" al resultado de las elecciones "a pesar del temor del PP y la esperanza del PSOE". El inmigrante, en su opinión, "no atenderá a siglas políticas sino al grado de sensibilidad que encuentre en cada Ayuntamiento, independientemente de su color ideológico". El vicepresidente cuarto de la FAMP y alcalde de Vera (Almería), Félix López (PA), se suma a la opinión mayoritaria de los restantes regidores. "Personalmente opino que si viven y trabajan en nuestro país, tienen todo el derecho a elegir a sus representantes, estamos en la Europa de los derechos humanos y del siglo XXI", argumenta. López plantea que el criterio para otorgar este derecho debe ser la regularización. Ignora el impacto político que tendría: "No lo sé, el voto es secreto". En Vera residen alrededor de un 20% de extranjeros (la mayoría ecuatorianos).

En Andalucía hay 28 municipios con más de 5.000 habitantes y con más de un 10% de población extranjera, según datos del INE de 2005. El PP gobierna en 12 de estas localidades, el PSOE lo hace en nueve, el Partido Andalucista en tres y los independientes en cuatro (incluida Marbella). La presencia de extranjeros es significativa en 18 localidades donde los extranjeros representan más del 20% de la población, y en especial en los seis (Mojácar, Níjar, Fuengirola, Manilva, Mijas y Torrox) donde rebasan el 30%. Los municipios donde las variaciones en el censo electoral pueden tener efectos políticos notables por tener un resultado ajustado entre la primera y la segunda fuerza más votada en las elecciones de 2003 son La Mojonera, Vélez-Rubio y Vícar (Almería), Albuñol y Órgiva (Granada), Coín, Estepona y Manilva (Málaga).

Cartaya es el único municipio de Huelva con más de 5.000 habitantes y con más de un 10% de extranjeros. Su alcalde Juan Antonio Millán (PSOE) entiende que los derechos políticos de los inmigrantes empadronados resultan algo "indispensable y necesario para la plena integración de los nuevos vecinos". El alcalde les considera cartayeros: "Viven y trabajan en Cartaya, por eso, el hecho de que tengan derecho a meter su voto en una urna es consecuencia de las obligaciones que a cambio tienen como ciudadanos". No obstante, precisa que este derecho debe ceñirse a los estados con convenio de colaboración con nuestro país para ordenar los flujos migratorios. Y que entre esos acuerdos se incluya la reciprocidad en este derecho político".