Iberdrola instalará dos torres de alta tensión frente a un yacimiento arqueológico

La compañía Iberdrola iniciará en breve la instalación de dos torres de alta tensión, de unos 40 metros de altura, en el entorno de la Cova del Bolomor, en Tavernes de la Valldigna, uno de los yacimientos arqueológicos paleolíticos más importantes de la Península Ibérica, según denunció ayer el grupo municipal del Bloc.

Las dos torres forman parte del polémico trazado eléctrico que la compañía Iberdrola construye entre Villanueva de Castellón y Gandia, un proyecto que ha cosechado el rechazo de varios ayuntamientos afectados en las comarcas de La Ribera y La Safor que mantienen suspendidas las licencias de obras.

En el caso de Tavernes de la Valldigna, el gobierno del PP autorizó el paso del tendido por su término municipal. Organizaciones cívicas y ecologistas han impulsado movilizaciones contra esta obra, y advierten del "grave impacto ambiental, paisajístico y sobre el patrimonio histórico-cultural" que supondrá la consecución de la nueva línea de alta tensión. Fuentes de la Consejería de Cultura manifestaron ayer que la ubicación de las torres, a unos 300 metros del yacimiento, "se ajusta a la legalidad vigente" y es "una distancia considerable para reducir su impacto visual".

Huellas de hogueras

El Servicio de Investigación Prehistórica del Museo de Prehistoria de la Diputación de Valencia financia desde 1989 las distintas campañas de excavación en la Cova de Bolomor. Las intervenciones arqueológicas han conseguido recuperar más de 50.000 piezas líticas, cerca de 300.000 huesos de fauna variada, y huellas de varias hogueras, con una antigüedad de entre 250.000 y 300.000 años que, según los expertos suponen uno de los primeros testimonios del uso del fuego en Europa. Los datos hablan de la importancia del yacimiento.

Para el portavoz del Bloc en el Ayuntamiento de Tavernes de la Valldigna, Miquel Bononad, "la construcción de las torres en las puertas de la Cova de Bolomor, atenta no sólo contra la cultura valenciana, sino contra el patrimonio de la humanidad". Bononad reprocha además que dicha instalación "cuente con la autorización de la Generalitat Valenciana" y del gobierno local del PP. "La connivencia entre Generalitat, el PP de Tavernes e Iberdrola está pasando por encima de los intereses de la ciudadanía y del mundo científico", lamenta el edil nacionalista.

El Bloc insta al PP local a que "adopte medidas de protección" urgentes para preservar el aspecto original del entorno de Bolomor, y a que exija la modificación del trazado actual de la línea de alta tensión.

El concejal de Urbanismo en el Ayuntamiento de Tavernes, el popular Antonio Bono, reconoció que el plan urbanístico local protege el entorno del yacimiento, pero aseguró que la autorización final de la obra corresponde a la Generalitat.