La firma que pagó a Iglesias en México ignora por qué cobró también del Ivex

El empresario Carlos Santos, que organizó el concierto de Julio Iglesias en México por cuenta del Ivex para patrocinar la Comunidad Valenciana en 1999, ignora por qué la Generalitat pagó de nuevo a Midway International unos gastos que fueron asumidos por su firma, RAC Producciones. Santos salió ayer en defensa del ex delegado del Ivex en México Vicente Sendra, que ha sostenido en el juzgado que la firma Midway International, con sede en Irlanda, y que recibió del Ivex casi un millón de dólares por el recital mexicano, no participó para nada en ese evento.

"Pagamos todo lo necesario para el concierto", dice el portavoz de RAC

Carlos Santos, entrevistado ayer por la Cadena Ser, aseguró que su empresa RAC Producciones se hizo cargo de todos los gastos del recital de Julio Iglesias en México a cambio de la taquilla y los derechos del artista. Santos se mostró dispuesto a declarar en el juzgado que investiga el caso Ivex para ratificar la versión del ex delegado en México Vicente Sendra, a quien reconoció haberle hecho entrega de toda la documentación ya que no tiene nada que ocultar. El juzgado ha vuelto a solicitar esta semana al Ivex toda la documentación sobre los contratos de Julio Iglesias.

Santos manifestó que su firma, "en vez de pagar el caché de Julio Iglesias, que ya había pagado la Generalitat, tenía que asumir todos los gastos que suponía hacer una gala en el Auditorio Nacional de México y pagamos la producción y la publicidad del concierto".

El acuerdo, según explicó Santos a la Cadena Ser, incluyó también la cesión de entradas a la Generalitat para sus compromisos políticos y empresariales, un donativo de 100.000 dólares para la fundación México Unido y un pago de unos 60.000 dólares a una cuenta de Bahamas por unos costes adicionales del equipo del cantante contratado por la Generalitat para promocionar la Comunidad Valenciana.

La Generalitat, presidida entonces por Eduardo Zaplana, pagó casi un millón de dólares a la firma con sede en Irlanda Midway International y que operaba en Bahamas, supuestamente, para hacer frente a los gastos de organización del concierto de México. Un extremo que Carlos Santos desmintió ayer con rotundidad en sus declaraciones.

El empresario mexicano indicó que toda la información existente sobre el concierto de Julio Iglesias en México se la proporcionó "vía notarial" a Vicente Sendra. "Fue todo muy justo", afirmó el representante de RAC Producciones, que resaltó que las dos únicas personas con las que trató para cerrar el trato sobre el recital del cantante en el Auditorio Nacional de México fueron Sendra y Fernando Esteban de la oficina del cantante.

"Pagamos todo lo necesario para el concierto", sentenció Santos.

Las declaraciones de Santos avalan la tesis del ex delegado del Ivex en México de que la Generalitat pagó dos veces por un mismo concepto si abonó a Midway International por la organización del recital en México. Una tesis similar a la apuntada por el ex delegado del Ivex en Miami José Marquina.

Vicente Sendra, en sus declaraciones, indicó que realizaba sus propuestas al director general del Ivex José María Tabares, pero que éste le indicaba que tenía que consultar con Presidencia de la Generalitat.

El juzgado de instrucción número 19 de Valencia investiga desde hace más de seis meses la contabilidad del Ivex entre 1998 y 2000 relacionada con los contratos formalizados para promocionar la imagen de la Comunidad Valenciana mediante una serie de conciertos realizados por el cantante Julio Iglesias.

La instrucción del caso tiene lugar tras la denuncia presentada por ocho diputados socialistas que presentaron denuncia contra el ex director general del Ivex José María Tabares por posibles irregularidades en los pagos al cantante Julio Iglesias.

El Consell ha negado por activa y por pasiva -el último el consejero de Empresa, Justo Nieto- que el cantante Julio Iglesias cobrara de la Generalitat casi seis millones de euros por el contrato firmado en 1997 para promocionar la Comunidad Valenciana. Según la tesis del PP, el cantante gallego sólo cobró 2, 2 millones de euros. La diferencia, se abonó con un contrato B, cuya existencia es negada por la Generalitat.