"No pierdo la esperanza de que Batasuna alce su voz contra ETA"

El portavoz de Gesto por la Paz, Fabián Laespada (Bilbao, 1962), pide a la sociedad que no se deje atrapar por la desesperanza.

Pregunta. ¿Pretendían evitar la desunión que se produjo tras la bomba de Barajas?

Respuesta. Aquello fue lamentable. Pero, sobre todo, lo importante era que la sociedad reaccionara al momento ante la constatación de que ETA volvía a matar. Y exigir paz y libertad porque es nuestro derecho. Hay que pedirlo gratis.

P. Resaltan que "la metralla de ETA nos salpica a todos".

R. Todos estamos amenazados. Las víctimas son los cuerpos que pararon las balas que ETA arrojó contra toda la sociedad. Ya ha dicho Javier Balza que va a extender los escoltas a los ediles del PNV. Vienen a por todos, están en contra de la democracia.

P. Batasuna está inhabilitada...

R. Algunos piden un segundo derecho a votar porque se han sentido defraudados con ANV. No pierdo la esperanza de que Batasuna acabe entrando en la política y alce su voz contra ETA.

P. Zapatero ha explicado que ETA ha roto la tregua porque no aceptó negociar temas políticos.

R. Hubiese sido un fraude a la democracia, al pueblo vasco y español y a las víctimas.

P. Y ¿ahora qué? Unos piden volver al Pacto Antiterrorista, otros recuperar el de Ajuria Enea.

R. El Pacto de Ajuria Enea tenía la virtualidad de reunir a todos: una voz común y sólida contra la violencia. Eso es lo que ha faltado desde que PP y PSOE firmaron el Pacto Antiterrorista. Los nacionalismos se sintieron excluidos. Necesitamos algo nuevo.

P. El verbo preferido de Mariano Rajoy ahora es "rectificar".

R. El verbo rectificar en boca de Rajoy u Otegi exigiendo responsabilidades me sabe muy mal. El único responsable de la ruptura es ETA. El diálogo y la palabra no se le puede negar a nadie, pero la negociación es una cosa más seria. El Gobierno sólo tiene que hablar con ETA de presos y armas, y todo ajustado a la ley, que sabrá ser generosa y elástica. Pero ninguna concesión política al terror.

P. ¿Este nuevo fracaso, nos instala en la desesperanza?

R. La sociedad vasca es muy próspera, pero tenemos un cáncer: ETA sigue empeñada en usar la violencia para lograr fines políticos. Se acabó lo de "ése es español", "es policía" o "algo habrá hecho". Ahora decimos: "Es una persona y no se merece morir". No estamos como hace 20 años: ya no aceptamos la amenaza de muerte.

P. ¿La respuesta del Estado es la correcta con De Juana y Otegi?

R. El Estado tiene que demostrar firmeza siempre. Cuando De Juana muestra toda su arrogancia, es normal que la ley se ponga en la parte más dura. Y la acusación contra Otegi era grave: enaltecimiento del terrorismo. Deben entender que la ley puede ser muy fuerte con ellos.