Atrapadas en la telaraña administrativa

A. P. ha quedado en el puesto número nueve de la OPE de Osakidetza de enfermeras especialistas en salud mental y J. M. en el 31. El próximo día 29 se publicarán las listas definitivas, casi un año después del primer examen y después del farragoso proceso de valorar todos los méritos, la formación y el conocimiento de idiomas. Hay 47 plazas, por lo que, en principio, ambas la han sacado y deberían estar de enhorabuena. Sin embargo, ninguna de las dos se encuentra de humor para celebrar nada. ¿Por qué?

Pues porque no pueden acreditar el título de especialistas en salud mental debido a que el Ministerio de Educación no ha realizado la prueba para que las enfermeras que no disponen de él lo consigan. Algo a lo que se comprometió en 2005. El caso es que ambas han quedado atrapadas muy a su pesar en la espera telaraña administrativa. Las dos terminaron su carrera de enfermería y empezaron a trabajar en 1990 en el Hospital Psiquiátrico de Las Nieves, en el que siguen desde entonces. Hasta 1987 existía todo tipo de especialidades dentro de la carrera de enfermería, pero a partir de ese año el ministerio las retiró. Y no las volvió a regular hasta 1998. Es decir, 11 años de vacío en los cuales las enfermeras han seguido sacando sus títulos, pero sin ninguna posibilidad legal de lograr una especialidad, como la de salud mental u otra. Por eso, las enfermeras fueron especializándose en los diferentes campos por cualquier otra vía, como cursos de postgrado.

El Ministerio de Educación no les da opción a sacar la especialidad en salud mental

Para solventar la situación, el Gobierno central aprobó un real decreto en 2005 habilitando una vía excepcional para que las enfermeras formadas durante ese tiempo de vacío legal pudieran convalidar el título. Y daba de plazo hasta mayo de 2007 para que presentaran las solicitudes.

"El caso es que el tiempo ha pasado, el ministerio no se ha movido y Osakidetza convocó una OPE en diciembre de 2006 en la que por primera vez sacó plazas de enfermeras especialistas en salud mental", explica A. P. Osakidetza no aportó al concurso público algunas de las plazas ocupadas de manera interina por personas sin la titulación a la espera de que se resolviera el entuerto. Pero muchas profesionales se presentaron al resto con la confianza de que había tiempo suficiente para que el ministerio aclarara la situación.

"He ido varias veces al Ministerio para apremiarles y exponerles nuestra situación, pero no ha servido de nada", se lamenta A. P. El día 29 de este mes se publica la lista definitiva con las plazas adjudicadas, después habrá diez días de alegaciones, pero prácticamente no se moverá nada. De las 47 plazas que han salido, al menos diez personas que las han sacado se encuentran en la misma situación de A. P. y J. M. "La sensación que tenemos es de impotencia, de una gran impotencia. Ver como pasa el tiempo, que no se mueve nada, que sacas una OPE con lo difícil que resulta y al final te quedas sin nada resulta doloroso. Nos da mucha rabia", claman ambas.

La maquinaria burocrática les ha pillado. "¿Qué culpa tenemos nosotras del vacío legal entre 1987 y 1998, de que el ministerio no hiciera nada para resolverlo?". "Es muy duro", añaden, "ver como sacas una plaza y al final se te escapa todo de las manos. ¿Qué mayor demostración de que somos competentes para este trabajo es que llevamos 17 años en él y que hemos aprobado una OPE específica?". Cada día que pasa hasta que llegue el 29 es una agonía para ellas.