Anulada una obra que favorece a la familia del ex alcalde de Salou

El Ayuntamiento de Salou (Tarragonès) y la Agencia Catalana del Agua (ACA) formalizarán el acuerdo que debe reformar el proyecto de desvío del barranco de Barenys, una obra prevista por el anterior Consistorio y que hubiera beneficiado a familiares del ex alcalde, el independiente Esteve Ferran. El proyecto prevé recalificar terrenos rústicos y pasarlos a urbanizables.

Representantes de los tres grupos que forman el Ejecutivo local (PSC, CiU y la formación independiente RDS) se reunieron ayer con los vecinos afectados por las expropiaciones previstas en el plan para asegurarles que el viejo proyecto no se llevará a cabo.

El Ayuntamiento y el ACA han diseñado una alternativa que garantizará la salida de agua en caso de inundación sin necesidad de modificar el trazado de la riera, como pretendía el anterior Consistorio. Más de la mitad de las fincas afectadas por este cambio de trazado son propiedad de dos empresas, Blagater y Mas Clariana, que administran el primo del ex alcalde, Esteve Blasi Ferran, y el hijo de éste último, Javier Blasi. Se trata de un sector tradicionalmente rústico pero que el anterior Ejecutivo recalificó en 2003, cuando aprobó la revisión de la normativa urbanística local. El concejal de Urbanismo era Esteve Ferran Gombau, hijo del alcalde.

Alivio de los vecinos

Durante la tramitación de este texto, Blagater y Mas Clariana fueron adquiriendo propiedades en la zona. El primo del ex alcalde es, además, el propietario de uno de los cámpings de mayor fama en Salou, situado exactamente al lado del terreno que quedaría liberado si se hubiera llevado a cabo el desvío de la riera.

Los vecinos afectados por las expropiaciones que comportaba el desvío del barranco -que siempre se inunda cuando llueve en abundancia y facilita a los fotoperiodistas imágenes de turistas con el agua hasta las rodillas- aseguraron ayer sentirse aliviados. Están convencidos de que, lejos de tratarse de un proyecto de interés público, el plan de la riera de Barenys estaba diseñado por el Consistorio para beneficio de unos pocos, y así se lo han hecho constar a la Fiscalía de Tarragona, que ha trasladado al Juzgado de Instrucción número 4 una denuncia sobre éste y otros casos de presunta corrupción urbanística en Salou. De hecho, la revisión urbanística especificó que parte de la zona liberada por el desvío de la riera podría convertirse en un resort. Otras zonas pasarían a ser suelo edificable apenas a unas decenas de metros del paseo marítimo. En 2004, Mas Clariana y Blagater poseían 32 de las 118 fincas afectadas por el proyecto, cifra que aumentó hasta más de 60 a finales del año 2005.

El alcalde, Antoni Banyeres (PSC), explicó que desde su toma de posesión tras las últimas elecciones ha negociado con la ACA una solución distinta a la inicial que, por otra parte, ya tenía luz verde de la Generalitat. "Nunca pensé que desviar la riera fuera lo mejor, porque nos quedaríamos con una desembocadura que nos dañaría muchísimo la playa cuando se inundara", dijo.