Los socialistas hacen el vacío al cardenal García-Gasco en la catedral de Valencia

El hartazgo de los socialistas por los ataques sin cuartel de la Conferencia Episcopal y, en especial del Arzobispo de Valencia, el cardenal Agustín García-Gasco, resonó ayer entre las paredes de la catedral. Los socialistas optaron por hacerle el vacío a García-Gasco durante la celebración del tedeum (el acto religioso de acción de gracias a Dios) convocado por la Generalitat con motivo del 800 aniversario del nacimiento de Jaume I.

El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Antoni Bernabé, asumió la representación socialista en el acto institucional. En el mar de bancos de la catedral tan sólo el portavoz de la Diputación de Valencia, Rafael Rubio, y los ediles Ana Botella y Juan Ferrer. Atentos todos ellos a la posibilidad de que el ultraconservador arzobispo de Valencia volviese a cargar contra el Gobierno o los socialistas. Ni la gestora del PSPV, ni los parlamentarios autonómicos y estatales, ni el ex presidente de la Generalitat, Joan Lerma, decidieron acudir al acto presidido por Agustín García-Gasco, pese a que la dirección provisional de los socialistas valencianos había decidido dar libertad a sus cargos para que actuasen en conciencia. El malestar socialista por la convocatoria del tedeum se agravó por la falta de invitación de la Generalitat a la vicepresidenta del Gobierno y candidata al Congreso por Valencia, María Teresa Fernández de la Vega.

La vicepresidenta del Gobierno, ignorada en la agenda oficial de los actos festivos con motivo del aniversario de Jaume I, improvisó su propia agenda con la que recuperar protagonismo.

De camino a Valencia, De la Vega se detuvo en Buñol a comprobar el estado de las obras del AVE y, posteriormente, asistió a los actos de Jaume I a pie de calle.

Frente a las inexistentes relaciones que mantiene el cardenal con los socialistas, Agustín García-Gasco no dudó ayer en detenerse, durante su entrada al tedeum de la catedral, para saludar con afecto al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, y a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá. No en vano se trata de dos de los dos políticos que más han impulsado la presencia del Arzobispado de Valencia en la vida política. Hasta ahora ningún cargo del PP valenciano se ha pronunciado sobre la intervención de los obispos españoles en la campaña electoral.

La buena sintonía entre el Arzobispado de Valencia y la Generalitat y el Ayuntamiento convirtió ayer la catedral en el epicentro de los actos preparados para celebrar el nacimiento del rey Jaume I. Por allí pasaron un buen número de bandas de música, el desfile medieval y los correfocs.

En las intervenciones previas al tedeum cantado por el Cor de la Generalitat, el vicepresidente primero del Consell, Vicente Rambla, tomó la palabra para ensalzar la figura de Jaume I y recordar su entrada en la ciudad de Valencia. Rambla también hizo referencia a la fe del fundador del Reino de Valencia y a su relación con la catedral en la que se celebró el acto.

García-Gasco también tomó la palabra para referirse al "rey don Jaime", a su nacimiento y a su bautismo. El arzobispo de Valencia, que optó por un discurso breve y sin aristas, recordó la lealtad del rey Jaume I al Papa y afirmó que pese a la hegemonía musulmana se mantuvo el cristianismo "de modo precario" en Valencia durante la "época islámica".

La mayoría de las bancadas de la catedral, en un sábado laborable alterado por los actos de l'Any Jaume I, se llenaron con cargos del Partido Popular. No faltaron alcaldes, presidentes de las diputaciones, diputados autonómicos y estatales, directores generales y representantes de las más diversas instituciones (patronales, universidades, amas de casa, etcétera). Ni los representantes de Esquerra Unida, ni los de Iniciativa del Poble Valencià asistieron, aunque sí el secretario general del Bloc y parlamentario de Compromís, Enric Morera. Ante el clima creado, la vicepresidenta del Gobierno mantuvo su agenda oficial durante la mañana y se desplazó a Valencia para almorzar.

De la Vega paseó por el entorno de la catedral de Valencia, donde conversó con varios jóvenes, y por la tarde acudió a los distintos actos festivos organizados para conmemorar el aniversario de Jaume I. Hoy la vicepresidenta mantendrá su agenda en el parque natural de L'Albufera y en el área metropolitana.