Centenares de oportunidades laborales

Para los 343.700 parados que hay en Cataluña, la pesada tarea de dejar currículos se ha hecho algo más llevadera esta semana. En el II Salón del Trabajo, que acaba hoy en L'Hospitalet, miles de desempleados han podido encontrar ofertas para todos los gustos: 130 puestos de instituciones, empresas y entidades que ofrecen trabajo, formación y herramientas para salir de la cola del paro.

Organizado por el Servicio de Ocupación de Cataluña (SOC), dependiente de la Generalitat, el salón atrae a muchos desempleados (6.700 personas lo visitaron el jueves), aunque en los mostradores se mezclan ofertas laborales con publicidad pura y dura. "Todas las exposiciones de cara al público son interesantes para darte a conocer", confiesa un expositor. Gorras, camisetas, bolsas, bolígrafos y elementos de mercadotecnia se mezclan en el equipaje del visitante con carpetas repletas de currículos.

La mayoría de las empresas que exponen en el salón no ofrecen puestos concretos de trabajo, pero sí buscan personas que encajen con sus exigencias laborales. "Nos fijamos en tres perfiles: administrativos, dependientes y mozos de almacén", explica la encargada de Caprabo, donde muchos parados hacen cola para dejar sus datos. Pese a la dificultad para encontrar trabajo, los visitantes no pierden la esperanza de encajar en el perfil y agradecen la posibilidad de disponer de centenares de oportunidades en un solo espacio. "Te facilita mucho el trabajo; no debes caminar horas y horas para entregar unos cuantos currículos" , explica Ricardo, ecuatoriano de 25 años que hace 10 meses perdió su trabajo en la construcción. Los afectados por la crisis son mayoría. "Perdí mi empleo en una aseguradora por una gran fusión y reorienté mi carrera laboral", explica Ana, que a sus 43 años busca trabajo en alguna editorial. Del salón destaca que la oferta "sea presencial, que te vean la cara", aunque lamenta que no tendrá suerte por buscar "un trabajo muy concreto". Como ella, son muchos los que buscan un empleo determinado y no lo encuentran entre tanta oferta. "No buscan personas de mi perfil", lamenta Alejandro, un joven de 30 años licenciado en Administración y Dirección de Empresas. El evento "es muy útil para jóvenes abiertos a todo tipo de ofertas", agrega.

Entre los profesionales que buscan las empresas abundan técnicos, administrativos, comerciales y vendedores. En los puestos de supermercados y tiendas de ropa pueden verse las colas más largas de personas en busca de un trabajo, compartiendo el honor con el puesto de las Fuerzas Armadas: "Viene gente de todo tipo. Es sorprendente la cantidad de personas que se han acercado", comenta el teniente Garrido, que atiende a los interesados.