Medio Ambiente avala una empresa que incumple la ley

La Dirección Xeral de Calidade e Avaliación Ambiental ha concedido la máxima calificación a la empresa de atún y productos congelados Jealsa Rianxeira, SA, instalada en Boiro, sobre la que pesan sentencias firmes que anulan la legalidad urbanística de sus plantas frigorífica y cogeneradora. A estas se suma otra, que admite recurso, emitida el 31 de octubre por un juzgado de Santiago, y que destaca la peligrosidad de la cogeneradora de Jealsa, de la que procede la energía de la empresa.

La sentencia señala que esta planta carece de la preceptiva autorización de Augas de Galicia, de la declaración de impacto ambiental, de autorización de Industria y que incumple las disposiciones del Reglamento de Actividades Molestas, Insalubres, Nocivas y Peligrosas (Raminp). La titular del juzgado compostelano destaca, además, que la planta "puede ocasionar contaminación de dominio público hidrológico".

La instalación incumple también, según la misma sentencia, el planeamiento urbanístico y la Lei de Costas y "emite dióxido de azufre, calificado como contaminante prioritario en la Ley de Protección del medioambiente atmosférico". Un cúmulo de defectos por los que el juzgado deniega al empresario, el ex alcalde de la localidad por el PP, Jesús Alonso, la licencia de actividad, pese a que la planta no se ha parado nunca y a la concesión de la "autorización ambiental integrada" de Medio Ambiente. La Consellería le concede la alta distinción pese a que, a la vista de las sentencias, la empresa no reúne las condiciones que el mismo departamento de la Xunta exige para autorizar este tipo de industrias.

Frente a la ausencia de licencia, en la distinción de calidad que le concedió Medio Ambiente consta que figura el "informe urbanístico expedido por la actual corporación local" y que se presentó la documentación "de prevención y control integrados de la contaminación".

Durante los últimos 4 años, el alcalde nacionalista de Boiro, Xosé Deira ha permitido la actividad de la cogeneradora, que incumple los requisitos que marcan las leyes medioambientales que él mismo exigió al empresario. Pero el actual alcalde sostiene que concedió la licencia "con condiciones" porque la empresa "tenía todos los informes favorables de de la Xunta" del PP. "Si le denegamos la licencia de actividad, podría pedirnos daños y perjuicios, por eso decidimos dársela con condiciones". Así, el 13 de abril de 2004, la junta de gobierno, presidida por el alcalde del BNG, concedió licencia de actividad al cogenerador. Pero una semana después otorgó otra condicionada "al cumplimiento de las medidas correctoras de Medio Ambiente".

El regidor nacionalista se basa en el mismo argumento de las autorizaciones de la época del PP para justificar que no haya parado la actividad del cogenerador, aún cuando reconoce que no cumple las disposiciones medioambientales. Deira sostiene que el empresario se ha comprometido "a cambiar el fuel-oil por gas natural".

Por su parte, la Consellería de Medio Ambiente da por buena la autorización ambiental concedida a la empresa y señala que conservera y cogeneradora "son jurídicamente dos empresas distintas". Y, aunque la última "sea indispensable para el funcionamiento de la primera y esté pegada a ella", la calificación integrada "se concede sólo a la fábrica de atún".