El parón del automóvil hunde la producción industrial

A golpe de estadística, la comparación con 1993, el año que simbolizó el peor momento de la economía española en el último cuarto de siglo, es cada vez menos ociosa. Entonces, las sucesivas reconversiones siderúrgicas dejaron extenuada a la industria, que acumuló 14 meses consecutivos con la producción en caída libre. Ahora, la actividad del sector lleva seis meses marcha atrás, pero el retroceso es más intenso aún.

Según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE), el índice de producción industrial bajó en octubre un 12,8%, un descenso interanual que supera los de 1993, primer año para el que hay datos comparables. Si en los noventa el protagonista del declive industrial fue la siderurgia, en los últimos meses el bajonazo en la actividad se explica por el frenazo en seco de los fabricantes de vehículos.

El Banco de España da por hecho que la economía está ya en recesión

La producción de la industria del automóvil se dejó casi un tercio (un 29%) de su valor respecto a octubre de 2007. No sólo es el subsector que más cae -los datos parciales, a diferencia del índice general, no excluyen los efectos del calendario-, sino que es, con diferencia, el que más peso tiene entre los que retroceden.

La producción de los fabricantes de piel y madera también cae más del 20% en tasa interanual, pero apenas concentra un 2,5% de las ventas de la industria española. Algo más pesa (7% de las ventas totales) la fabricación de productos minerales no metálicos, cuya actividad retrocedió un 25%.

Pero es el subsector del automóvil el que más tira hacia abajo del índice general. De las 18 plantas que tienen los fabricantes en España y de sus empresas proveedoras dependen casi un 15% de las ventas de la industria, un 26% de las exportaciones y más de 300.000 puestos de trabajo.

La pérdida de producción respecto a lo que se facturaba hace un año se da por descontado, al menos, para noviembre (aún sin computar en la estadística), diciembre y enero. La catarata de expedientes de regulación de empleo comenzó el mes pasado, y las empresas han optado por alargar los días de parada en las plantas antes y después de las fiestas navideñas.

El último boletín económico del Banco de España, también publicado ayer, resalta el deterioro industrial como una de las claves de que la actividad de la economía española "siga contrayéndose" en el tramo final del año, tras el retroceso del PIB en el tercer trimestre.

El análisis del Banco de España apuntala el vaticinio generalizado de que España está ya en recesión. El organismo supervisor prevé para el tramo final del año una "contracción adicional" de la construcción, que se prolongue el "reciente empeoramiento de la industria" y que también baje la producción del sector servicios.