Las Bolsas aplauden el resultado del 'test' a la banca de EE UU

Si los bancos no son insolventes y la destrucción de empleo se modera un poco, hay motivos para el optimismo. Al menos para los inversores en Wall Street, y por extensión, en todos los mercados de valores. Las Bolsas europeas registraron subidas cercanas al 2% (el Ibex cerró con un repunte del 1,9%), empujadas por las cotizaciones de las entidades financieras. Wall Street también amaneció entregada al alza bursátil, una tendencia que confirmó al cierre de la sesión, con una ganancia del 2%.

Los inversores hicieron ayer su examen particular a los resultados del test de estrés a los bancos estadounidenses, presentados el jueves por la Reserva Federal. Su conclusión es que el estado de salud del sector es mejor que lo que anticipaban, una lectura que triunfó en la Bolsa y enfrenta a los expertos. Sólo 10 de los 19 mayores bancos del país necesitan recapitalizarse, y sólo por un total de 75.000 millones de dólares (55.600 millones de euros), cifra pequeña en comparación con lo que se temía hace apenas dos meses.

"Paso a paso, comienza a haber progresos", insiste Barack Obama

El optimismo bursátil se alimentó también con el nuevo dato del mercado laboral. Pese a ser negro -en abril se perdieron 539.000 empleos- resultó ser, comparativamente, mucho mejor que el de marzo, cuando se anunció la destrucción de 699.000 empleos. Es también la cifra más baja en los últimos seis meses.

Aunque la tasa de paro haya alcanzado, con un 8,9% de la población activa de EE UU, su peor registro en 26 años, pesó más el fuerte interés por interpretar cualquier dato no excesivamente malo como preludio de algo bueno. Por eso ayer 539.000 parados más se convirtieron en sinónimo de que el fin de la recesión podría por fin planear sobre el horizonte. Una cifra que hay que tomar con pinzas, ya que fueron las contrataciones impulsadas por el Gobierno las que compensaron en parte los malos números del sector privado, donde se contabilizaron 611.000 empleos menos.

"Es un dato alentador", afirmó el presidente de EE UU, Barack Obama, al referirse a la moderación en la destrucción de empleo. "Paso a paso, comienza a haber progresos", añadió.

Los bancos señalados por la Reserva Federal se pusieron manos a la obra y comenzaron a recaudar capital. Wells Fargo y Morgan Stanley, a los que el gobierno exige 13.700 millones de dólares y 1.800 millones de dólares respectivamente, ya se han asegurado recaudar más de 11.000 millones entre los dos, mediante la colocación de acciones y deuda. Bank of America, que precisa la cifra más alta de todos, 34.000 millones, se registró ante el supervisor bursátil para ofrecer 1.250 millones en títulos comunes. "Vamos a cumplir y tenemos claro el camino para hacerlo", declaró ayer su consejero delegado Kenneth D. Lewis.

Sólo una noticia empañó el optimismo que prendió en los mercados: Fannie Mae, la mayor proveedora de financiación hipotecaria del país junto a Freddie Mac (ambas estatales), solicitó al tesoro una inyección de dinero público de 19.000 millones de dólares, apenas un mes después de haber recibido 15.000 millones.