El Colegio de Médicos denuncia la situación de la sanidad madrileña
La institución critica la falta de personal y advierte de una posible huelga
El Colegio de Médicos de Madrid, institución poco dada a criticar públicamente las políticas sanitarias del Gobierno regional, ha suscrito las quejas que buena parte de sus colegiados llevaron a la asamblea general la semana pasada. El colegio habla de "descontento generalizado" de los médicos que trabajan en la sanidad pública en un documento en el que enumera algunos de los problemas a los que se enfrentan y advierte de una posible huelga.
El primer apartado lo dedica a los nuevos hospitales que Esperanza Aguirre inauguró en 2008: "Se han abierto utilizando plantillas de los antiguos hospitales sin reposición de las plazas vacantes", asegura. Continúa diciendo que cuentan con "recursos humanos y técnicos precarios" y critica finalmente "la no existencia de un programa informático homogéneo y compatible que interaccione con todos los hospitales".
Hace un mes hubo una reunión con Aguirre para trasladarle las quejas
El comunicado es insólito, ya que la institución que preside Juliana Fariña, con 36.000 colegiados, no suele entrar a comentar estas cuestiones. El colegio lo ha hecho público días después de que las dos vocalías con más peso de la institución, la de primaria y la de hospitales, suscribieran un manifiesto en el que alertaban del "deterioro" y la "mercantilización" que sufre la sanidad pública madrileña debido a los recortes de financiación, la escasez de profesionales y la Ley de libre elección y área única, recién aprobada. El sistema sanitario "está sufriendo un proceso de privatización y mercantilización que cambia los objetivos del modelo diseñado en la Ley General de Sanidad", leyó el vocal de primaria, Miguel Ángel Sánchez, en el turno de ruegos y preguntas de la asamblea general. Hubo aplausos cuando terminó.
Con el manifiesto, los médicos pretendían que la junta directiva del colegio les respaldara públicamente, y parece que lo han conseguido. No sólo por difundir el documento, sino porque, según reveló el vicepresidente, Miguel García Alarilla, hace un mes miembros de la junta se reunieron con Esperanza Aguirre para entregárselo en mano. "La presidenta dijo que se lo entregaría al consejero, porque eran temas muy concretos, pero que intentaría resolverlo". Esa reunión llevó a otra, según García Alarilla, con la viceconsejera Belén Prado, en la que la junta directiva del colegio manifestó estar en contra del área única (supresión de las 11 áreas sanitarias actuales para crear una sola para seis millones de habitantes) "desde un punto de vista asistencial".
El "descontento" de los médicos ha llegado a tal punto que el colegio alerta de la posibilidad de que decidan ir a la huelga. "Es posible que surja algún movimiento similar al del año 1987 que aproveche el descontento profesional y haga peligrar el normal funcionamiento del sistema sanitario", asegura el documento. Ese año los médicos protagonizaron una huelga de varios meses. "Avisamos de que se empiezan a dar las mismas situaciones que se dieron en su día", insiste García Alarilla.El documento elaborado por el Colegio de Médicos de Madrid, titulado Razones del descontento generalizado de los médicos que prestan su asistencia en instituciones públicas, denuncia también cuestiones puramente profesionales. Destaca "aspectos positivos", como la puesta en marcha de la carrera profesional, y, a renglón seguido, "aspectos negativos", como "el escaso cumplimiento de los acuerdos alcanzados para la implantación de la carrera profesional".
El documento destaca también los "contratos precarios" que Sanidad está haciendo a los médicos, que "suponen inestabilidad en el puesto de trabajo".
El colegio tampoco estaba de acuerdo con la jubilación forzosa de los médicos a los 65 años, según el documento, que es anterior a la publicación en el Boletín Oficial de la resolución que instauraba la medida. Trece días después la Comunidad de Madrid dio marcha atrás y publicó otra resolución anulando la anterior. La presidenta del colegio, Juliana Fariña, asegura que fue la presión de su institución la que hizo recular al Gobierno. El documento que presentaron a Aguirre asegura que "no es lógico que ante la supuesta escasez de médicos se jubile a profesionales en perfectas condiciones para su actividad asistencial".
La norma cambiaba, para endurecerlos, los requisitos que debían cumplir los médicos que quisieran seguir trabajando hasta los 70 años. "Era algo más perverso que una jubilación forzosa", asegura García Alarilla. "Incluía la posibilidad de cambiar de puesto de trabajo al médico que quisiera continuar". Aunque el documento no es tan duro como el que leyeron los médicos en la asamblea, también habla de "criterios economicistas" que no contemplan la actividad docente y empresarial.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Icomem
- VIII Legislatura CAM
- Consejerías autonómicas
- Parlamentos autonómicos
- Comunidades autónomas
- Gobierno autonómico
- Madrid
- Política autonómica
- Personal sanitario
- Política sanitaria
- Parlamento
- Sanidad
- Política
- Salud
- Gobierno Comunidad Madrid
- Comunidad de Madrid
- Administración autonómica
- España
- Administración pública