"Tener 40 años ya no es problema para una actriz"

Jennifer Lopez, una de las habituales de la prensa del corazón, estuvo ayer en Madrid para presentar su última película, El plan B, la primera que hace en mucho tiempo, ya que ha estado dedicada a otros menesteres: ser madre. Los mellizos y su marido Marc Anthony no la han acompañado en su viaje a España. "Marc está en Puerto Rico trabajando. Le dan un premio muy importante en la gala de los Premios Billboard Latinos. Y los niños se han quedado en casa", cuenta. Pero admite que cada noche se cuelga del teléfono horas y horas para hablar con su marido.

Cuando se sienta ante los periodistas dice estar dispuesta a hablar de todo menos de su culo, ese que tiene asegurado en muchos millones de dólares. Ahora que acaba de cumplir los 40 reivindica otro tipo de cosas para defender su carrera. "Tener 40 años ya no es un problema. Me permite hacer papeles en un abanico amplio de edades. Evidentemente, si pretendiera hacer de adolescente sería ridículo", comenta con una sonrisa de chica buena.

Apareció en una sala del hotel Villa Magna vestida con un traje en tonos berenjena. Peinada con la melena ligeramente recogida y maquillada bastante natural, se mostró extremadamente educada y simpática, aunque no se levantó para saludar, quizá agotada por los taconazos a los que se había subido.

"Lo mejor de ser actriz es poder hacer todos los días lo que más me gusta hacer. Siempre quise ser actriz", cuenta feliz por haber regresado al trabajo. En esta nueva etapa profesional también ha retomado la música y prepara un nuevo disco.

Pero por mucho que se empeñe en hablar de su trabajo, sabe que a muchos lo que les interesa es su físico. Y da su receta de belleza: "No bebo, no fumo. Duermo todo lo que puedo. Pero creo que nada de esto es suficiente si no se es feliz. La felicidad sale de dentro".

El plan B se estrena el día 7 de mayo.